El debate está servido en el seno de la OTAN y de la Unión Europea. ¿Debe el país liderado por Volodimir Zelenski utilizar los sistemas de armas donados por sus socios occidentales para atacar a Rusia en suelo ruso? En estos momentos ningún país aliado se plantea que Ucrania no este legitimada para realizar este tipo de ataques, no en vano fue Rusia quien inició la guerra, sino que la cuestión es si debe hacerlo con armamento de su propio arsenal o también con el donado por sus aliados.
El propio Zelenki mostró esta petición públicamente durante la firma del acuerdo de seguridad Bélgica-Ucrania que se celebró este martes en Bruselas. Un tratado similar al que se firmó con España, que también se ha firmado con media docena de países más de la OTAN y la UE, y que durante la tarde-noche de este martes firmarán también Ucrania y Portugal.
El uso de armamento occidental en territorio ruso que ha sido apoyado este martes por altos representantes de las dos organizaciones supranacionales. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha asegurado que “el derecho a la defensa propia incluye atacar objetivos militares legítimos dentro de Rusia. Y esto es particularmente relevante ahora, porque los combates más fuertes están ocurriendo en la región de Járkiv, cerca de la frontera”.
“Algunos aliados no han impuesto restricciones en las armas que han entregado; otros sí, y creo que ha llegado el momento de considerar esas restricciones, también a la luz del desarrollo de la guerra. Esto no hace a los aliados de la OTAN parte del conflicto”, recalcó Stoltenberg.
Del mismo modo se ha expresado Josep Borrell, el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Seguridad, quien ha pedido mantener un “equilibrio” entre la necesidad de Ucrania de atacar suelo ruso y el riesgo de escalada en el conflicto: “De acuerdo con la ley de la guerra, es perfectamente posible, no hay ninguna contradicción en tomar represalias, poder contraatacar contra quien me ataca desde su territorio”.
Por su parte, el presidente ruso Vladimir Putin ha advertido de “graves consecuencias” si se usa armamento occidental contra Rusia. “Los países pequeños deberían ser conscientes de lo que se juegan. Deberían ser conscientes de que son países con territorio pequeño y una población densa. Deberían tener en cuenta este factor cuando hablan de ataques en las profundidades del territorio ruso. Esto representa una escalada y un paso más hacia un grave conflicto en Europa y un peligroso conflicto global”, ha señalado.
Países a favor y en contra
Una vez contemplada la actual escalada de tensión, ¿qué países están a favor y en contra de qué Ucrania pueda atacar Rusia con armas occidentales? Actualmente, las naciones que no ven con buenos ojos que ese material militar sea empleado son Estados Unidos, Alemania, España, Italia, Bélgica o Hungría, que muestran su oposición férrea por el riesgo de que Moscú pueda interpretarlo como una señal más hacia la confrontación directa.
“Tenemos una posición muy clara, no autorizamos el uso de material militar italiano fuera de las fronteras de Ucrania”, dijo este martes el vicepresidente de Italia y ministro de Exteriores, Antonio Tajani.
Por el contrario, el mayor apoyo a que Ucrania utilice armamento occidental para atacar en territorio ruso está en Reino Unido, Francia, Países Bajos y la Europa del Este. Naciones como Estonia, Letonia, Lituania y República Checa han facilitado su armamento a Ucrania sin ningún tipo de restricción.
“Es totalmente lógico. Se defienden de la agresión, defienden a sus ciudadanos y tienen todo el derecho a usar todas las posibilidades para su defensa”, señaló este martes Petr Fiala, primer ministro checo.
También el presidente francés Emmanuel Macron se mostró este martes a favor de que Ucrania pueda utilizar armas occidentales contra Rusia para neutralizar puntos desde donde Moscú lanza sus misiles, siempre y cuando los objetivos no sean civiles: “Creemos que debemos permitirles neutralizar los sitios militares desde donde se ataca a Ucrania, pero no podemos permitir que se toquen otros puntos civiles u otros objetivos militares”.
