Expertos internacionales de más de una treintena de países debaten esta semana en la Casa de la India de Valladolid los estándares de calidad de la aplicación del blokchain y los registros de distribución en el día a día.
«La ciudad se ha convertido estos días en la capital mundial del blokchain y d elas tecnologías del registro distrubuido», destacaba este miércoles la consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral, durante el arranque de esta jornada en el marco del Plenario del Comité Técnico de la Organización Internacional de Normalización.
Allí, la consejera ponía dos casos de éxito en Castilla y León de blokchain, como son la plataforma agroalimentaria, para asegurar la trazabilidad de los productos y que permitirá a las empresas del sector tener una mayor eficiencia; y el proyecto ‘Cinderella’, del Centro de Supercomputación Scayle, que genera nuevas claves cuánticas para evitar ataques cibernéticos.
González Corral destacaba que hay normas ISO de calidad para los materiales en la construcción de carreteras o viviendas, pero también cuando se adquiere un electrodoméstico. Y, en este sentido, ponía en valor los estándares de calidad para nuevas tecnologías que es lo que se está debatiendo en Valladolid.
Emilio Dávila, jefe para la Unidad de la Estandarización de la UE, defendía la importancia de que los estándares internacionales que se usan en todos los aparatos electrónicos, en todos los servicios digitales, sean interoperables, pero también que incluyan los valores que reivindica la UE, informa Ical.
En este sentido, apelaba a pensar en los estándares que respetan la privacidad, la protección de los datos personales de las diferentes personas. “Si no lo hacen así, el estándar no sería aplicable y tendríamos un serio problema”, advertía.
Finalmente, también hablaba en la inauguración del plenario la directora de Programas de Normalización y Grupos de Interés en UNE, Paloma García, para quien la normalización del desarrollo de estándares es muy importante, ya que se acuerdan consensos de buenas prácticas en el desarrollo de documentos que son la base de las organizaciones, tanto públicas como privadas, para se pongan de acuerdo y hagan las cosas de la misma manera”.
Por ello, aseguraba que todos debemos contribuir, explotar y aprovechar el sistema de normalización “en favor de un progreso compartido de la sociedad y poder crear un mundo más digital y más sostenible”.
