Las Fuerzas Armadas continúan con su amplio despliegue de medios en diferentes zonas de la Comunidad Valenciana, una región que a día de hoy continúa siendo una de las más afectadas de España debido a las consecuencias de la DANA. Además de llevar días realizando diferentes labores como: búsqueda de desaparecidos, limpieza de calles, distribución de suministros básicos o asistencia médica inmediata entre los afectados; el Ejército de Tierra ha sido por el momento el único capaz de retirar los vehículos arrastrados hasta los cauces de ríos como el Turia o Mijares a su paso por la provincia de Valencia.
Desde el pasado fin de semana, dos de los helicópteros pertenecientes a las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (FAMET), están llevando a cabo tareas de recuperación de vehículos en los cauces de diferentes ríos, donde el acceso es complicado. Se trata de los helicópteros Chinook CH-47F, el único medio que por el momento ha sido capaz de trasladar vehículos desde el cauce del río, donde las grúas no pueden acceder debido a las consecuencias de las graves inundaciones provocadas por la DANA.
Los “Chinook CH-47F” en Valencia
El estado impracticable de zonas como la del puente en la presa de Pedralba, han hecho que estos helicópteros Chinook CH-47F hayan sido los únicos capaces de retirar los innumerables vehículos dañados, que han sido arrastrados hasta puntos de difícil acceso a causa de las enormes riadas provocadas por la DANA.
Estos helicópteros se han encargado de trasladar los vehículos rescatados hasta los puntos accesibles para su recuperación con medios terrestres. El comandante Rubén Sastre, destinado en el Batallón de Helicópteros de Transporte V de Colmenar Viejo, explica en el siguiente vídeo cómo han llevado a cabo la limpieza del río Turia entre las poblaciones valencianas de Villamarchante y Pedralba.
Una “maniobra compleja”
Para llevar a cabo con éxito esta misión, el comandante Rubén Sastre explica cómo previamente “han procedido a dejar unos equipos de carga sobre el terreno” con el objetivo de preparar los diferentes vehículos localizados. Una vez preparados, los helicópteros Chinook CH-47F se han encargado de recoger los mismos para “depositarlos en algún punto donde un vehículo civil o de la UME pudiera recogerlos” posteriormente.
Las condiciones del terreno no han hecho nada fácil esta misión. “Ha sido una maniobra bastante compleja” afirma el propio Sastre. Y es que, el estado del cauce del río Turia, junto con el hecho de que hubiera muchas poblaciones y casas juntas, hizo que tuvieran “muy poco espacio para maniobrar”. Muchos de estos vehículos se encontraban completamente cubiertos de barro, lo que hizo que “costara mucho tirar de ellos para poder arrastrarlos con el helicóptero”. Además de esta misión de limpieza de ríos, estos helicópteros también han colaborado en el transporte de personal y grandes cantidades de agua para tratar de recuperar la normalidad en muchas de las zonas más afectadas.