Para los amantes de los libros, estos son más que objetos, reflejan también la vida y la personalidad de su dueño. Hasta el punto de que para los bibliófilos, los ejemplares de sus bibliotecas pueden convertise en seres animados. Esta oda al libro ha centrado el discurso de ingreso en la Real Academia Española (RAE) de Pedro Cátedra García (Gabia Grande, Granada, 70 años), uno de las grandes filólogos españoles, historiador del libro, crítico literario, que desde este domingo ocupa la silla A de la institución, la plaza que estaba vacante desde el fallecimiento del también filólogo Manuel Seco Reymundo en diciembre de 2016.
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