El Supremo reclama a WhatsApp los mensajes de García Ortiz, a petición de la UCO

RMAG news

El magistrado Ángel Hurtado, que investiga en el Tribunal Supremo (TS) al fiscal general del Estado por la supuesta difusión de datos privados y reservados del novio de Isabel Díaz Ayuso, reclamó a WhatsApp los mensajes de Álvaro García Ortiz. Concretamente, los que el fiscal general recibió y envió los días del pasado marzo en que se fraguó la presunta filtración de un correo electrónico que remitió la defensa de Alberto González Amador al fiscal de delitos económicos Julián Salto.

El mail fue publicado en «El Plural», imagen incluida, tras pasar horas antes por manos de García Ortiz, como se ha evidenciado en la investigación. Y, antes, la Cadena SER dio cuenta de este correo, incluyendo textuales de cómo el abogado de la pareja de la presidenta madrileña le mostró al fiscal Salto su interés por llegar a un pacto de conformidad en relación a los dos delitos fiscales, y el de falsedad documental, que se investiga si cometió el empresario.

El instructor acordó como nuevas diligencias pedir directamente los wasaps a la aplicación de mensajería de Meta, después de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se lo reclamase como paso necesario para tratar de recuperar los mensajes que el fiscal general cruzó, entre los días 8 y 14 de marzo, con el móvil que falta y a través de las dos líneas telefónicas que tiene, una profesional y otra personal. Pide que se incluyan «detalles básicos» asociados a estas comunicaciones, como «el emisor, el receptor, el día y la hora».

La solicitud judicial se extiende también a las copias de seguridad que puedan tener almacenadas en su servidor de los chats y archivos multimedia. La UCO señaló al instructor que WhatsApp realiza dos tipos de copias de seguridad distintas, «atendiendo al lugar donde son almacenadas».

Una se almacena de manera local en la propia memoria del teléfono; y la otra, de forma ya virtual en la cuenta de Google que esté asociada al móvil. Es por ello que la comisión rogatoria que emite el Supremo también va dirigida a Google para que aporte toda la información que tenga en su poder sobre el fiscal general como usuario.

Lo que incluye, evidentemente, también las copias de seguridad de los móviles vinculados a su cuenta en la plataforma, de aplicaciones de terceros, copias de los wasaps, y archivos multimedia disponibles. Explicitándose, de igual forma, la «fecha, hora, origen, destino y tipología» que lleven aparejados.

Fuentes jurídicas señalan a LA RAZÓN sus dudas sobre que la comisión rogatoria vaya a dar sus frutos dado que Meta, que está registrada en Irlanda, no se caracteriza por su colaboración con autoridades judiciales nacionales y hay numerosos antecedentes de peticiones de la Justicia española, como esta, que nunca llegó a atender.

En cuanto al dispositivo móvil que le fue intervenido a García Ortiz en su despacho, un Samsung, el TS acuerda que los agentes puedan realizar una copia de trabajo del volcado de la información completa que almacenaba.

Este movimiento que reclamó la Guardia Civil va encaminado a poder realizar un análisis con el fin de acceder a aplicaciones de mensajería, como WhatsApp. Encarga, en este sentido a la UCO, que elabore un análisis de los mensajes que pueda haber del 8 al 14 de marzo del pasado año.

El instructor también les da el visto bueno para que se conecten a aquellos repositorios de información en los que consideren que pudieran encontrarse archivos susceptibles de contener la información de interés para la instrucción sobre la filtración y que, de ser preciso, se proceda a su descarga, procesado y posterior análisis.

Esta serie de actuaciones a ejecutar por los agentes, a los que el juez dio ayer su respaldo, son –así lo señala este en el auto– «razonables», «coherentes» y «necesarios» para la recuperación de la información vinculada a las aplicaciones de mensajería instantánea que el fiscal general utilizó en ese periodo de siete días del último mes de marzo.

El magistrado recuerda, en este sentido, que toda la información sobre las comunicaciones que hubo en el seno de la Fiscalía en aquellos días, y que se refieren al correo del letrado del novio de la presidenta madrileña con el fiscal Salto de cara a un acuerdo de conformidad, se hallaron, precisamente, en el WhatsApp de otros fiscales y del que fuera líder del PSOE de la Comunidad de Madrid, Juan Lobato.

El magistrado de la Sala de lo Penal había solicitado previamente a esta Unidad de la Benemérita que le informara sobre «la posibilidad de recuperar el contenido de las aplicaciones de mensajería instantánea» asociadas a las dos tarjetas telefónicas que utiliza García Ortiz.

El instructor lo reclamó después de que los agentes no localizasen ningún mensaje de aquellos días en el móvil que hallaron en su despacho, y al constatar que cambió de dispositivo móvil el pasado 23 de octubre, tras su imputación, y seis días antes del registro policial en la sede de la Fiscalía General.

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