La Guardia Civil investiga para identificar a los presuntos responsables de una violación grupal a una joven de 20 años que fue sometida a sumisión química mediante diversos pinchazos en brazos y piernas durante la celebración del Monegros Desert Festival, a finales del pasado mes de julio.
Según consta en el atestado remitido por los investigadores a la titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Fraga (Huesca), – que ha citado en octubre a la víctima para escuchar su testimonio y ofrecerle acciones penales-, la joven, acompañada de una amiga, sintió mientras asistía a los conciertos los referidos pinchazos, que en un principio interpretó como picaduras de insectos, informa Efe.
Sin embargo, en su denuncia, la joven hizo constar, que al tiempo que notaba cada uno de los pinchazos, observaba a un grupo de jóvenes que corrían a ocultarse entre el público, entre ellos uno con el que había mantenido meses antes una relación. Relató, además, que a partir de ese momento no pudo recordar nada de lo sucedido hasta que despertó tendida en el suelo, con indicios de haber sido obligada a practicar sexo oral.
La joven llamó a una segunda amiga que también se encontraba en el recinto y se desplazó a su coche para dormir hasta la mañana siguiente, momento en el que advirtió dolor en los genitales. Según su relato, se puso en contacto con la madre de otra expareja de su anterior novio, quien le contó que el sospechoso, con la ayuda de sus amigos, la drogaba para abusar sexualmente de ella.
Los investigadores pudieron determinar que este presunto agresor tenía antecedentes por malos tratos, ya que una mujer relató que le obligaba a oler una droga llamada ‘popper’ y a tomar ‘cristal’ en su bebida “para que así se encontrase mejor”.
