La Asociación de Afectados por el Parque de Cabañeros ha presentado una denuncia ante la Comisión Europea por la “gestión deficiente y negligente” del Parque Nacional de Cabañeros por parte del Gobierno de España.
Desde la asociación piden a Bruselas que tome medidas para evitar el desastre ecológico de uno de los ecosistemas más valiosos de Europa. Cabañeros está ubicado en Castilla-La Mancha y forma parte de la Red Natura 2000, por tanto, está sujeto a normativa europea para una protección medioambiental especialmente rigurosa.
“Hemos acudido a la Comisión Europea para que las autoridades españolas cumplan con sus obligaciones legales y conservacionistas antes de que se produzca un desastre ecológico irreversible”, asegura el abogado de la Asociación, Miguel Temboury.
Así mismo, han entregado a las autoridades europeas distintos informes técnicos y pruebas gráficas que constatan la “terrible degradación de los ecosistemas” del parque natural.
Los expertos denuncian la falta de acción no solo del gobierno español sino también de la Directiva Hábitats y la Directiva Aves de la Unión Europea.
En este sentido, el Gobierno de España aprobó en junio de 2021 el Plan Rector de Uso y Gestión de Cabañeros, pese a que la Ley de Parques Nacionales le concedió para ello un plazo de 6 años que expiró el 5 de diciembre de 2020. Cabe señalar que este proceso legal no establece actuaciones de control de poblaciones, sino que se remite al denominado Plan de Gestión de Ungulados, que no fue aprobado hasta junio de 2023.
La carencia de efectos por parte del Plan de Gestión de Ungulados ha sido una de las causantes de la denuncia interpuesta ya que este plan exige acuerdos entre la Administración y los titulares de derechos afectados que no se han celebrado hasta la fecha. Las consecuencias vienen cuando ya son tres temporadas las que han transcurrido sin poder realizar ninguna actuación cinegética.
Además esta falta de gestión está provocando una sobrepoblación de ungulados, que facilita enormemente la transmisión de determinadas enfermedades entre las especies, disminuye la cantidad de alimento y, con ello, la viabilidad de otro tipo de fauna.
La asociación destaca la situación de abandono absoluto que está afectando a la fauna y a la flora de Cabañeros. La denuncia recoge que según lo establecido en la ley, son las Administraciones Públicas las encargadas gestionar el parque y dotar de los recursos necesarios para mantener la integridad del hábitat y las especies protegidas que allí habitan.
La llegada del verano aumenta de manera exponencial el riesgo de incendios al verse degradada la masa forestal por sobrepastoreo y la falta de labores de desbrozo.
Todo ello, está teniendo un impacto negativo en especies en peligro como el águila imperial y el lince ibérico, cuyos hábitats se han visto gravemente comprometidos, limitando sus oportunidades de alimentación y refugio.
