Las pensiones por jubilación son un derecho fundamental para millones de personas alrededor del mundo, ya que suponen una fuente de ingresos esencial que permite a los trabajadores retirarse con una seguridad financiera tras numerosos años de contribuciones laborales.
No obstante, es importante señalar que existen varios tipos de pensiones de jubilaciones, desde aquellas que son gestionadas directamente por el Estado hasta las gestionadas por fondos privados, a aquellas que se basan en contribuciones individuales o de las empresas.
En este sentido, una de ellas son las pensiones no contributivas, las cuales han sido objeto de de una subida gracias al paquete de medidas económicas anunciadas por el Gobierno de España como respuesta a la catástrofe en Valencia, y otros municipios, a causa de la DANA que ha dejado cientos de fallecidos y numerosos desaparecidos.
Las novedades en las pensiones no contributivas
La medida anunciada, incluida en el ‘Plan de respuesta inmediata de reconstrucción y relanzamiento de la Comunidad Valenciana‘, compartirá legislación con la subida del Ingreso Mínimo Vital y el aplazamiento del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI).
De esta manera, esta medida, adoptada por el Consejo de Ministros, no tendrá un carácter general para todos los jubilados de España, sino que solo podrán acogerse a esta ayuda aquellos pensionistas que hayan resultado afectados por la DANA que ha azotado el este y el sur de la Península durante la semana pasada.
No obstante, todavía no se conoce cuáles serán los requisitos necesarios que habrá que cumplir para solicitar tal incremento y, además, cuál será la documentación obligatoria que habrá que presentar para optar a esta subida en la prestación, por lo que habrá que esperar a que se concreten las condiciones.
¿A cuánto ascenderán las pensiones?
El Plan adoptado por el Gobierno contempla el incremento de las pensiones no contributivas en un 15%, porcentaje que también se aplica de la misma manera al Ingreso Mínimo Vital, que también ascenderá. Tanto es así, que los pensionistas que se puedan beneficiar de esta prestación pasarán a cobrar las siguientes cantidades:
Pensión íntegra: pasará a cobrar 8.338,19 euros al año o, dicho de otra manera, 595,58 euros al mes, dividido en 14 pagas (incluyendo la paga extraordinaria de invierno y de navidad).Pensión mínima: cobrará 2.084,55 euros al año o, al igual que en el caso anterior, 148,89 euros al mes en 14 pagas.Íntegra con el incremento del 50%: recibirá 893,37 euros al mes, también dividido en 14 pagas, es decir, 12.507,285 euros al año.
¿Qué son las pensiones no contributivas?
Tal y como señala el portal de La Moncloa, las pensiones no contributivas son “prestaciones económicas que se reconocen a los ciudadanos que carecen de recursos suficientes para su subsistencia, incluso cuando no hayan cotizado nunca a la Seguridad o no hayan cotizado el tiempo suficiente para poder solicitar las prestaciones contributivas”.
En este sentido, los requisitos principales para solicitar una pensión no contributiva, que puede ser de invalidez o de jubilación, son carecer de ingresos, o tener ingresos inferiores a 7.250,60 euros anuales en cómputo anual, para 2024, o, en el caso de que el solicitante conviva con familiares, la suma de las rentas o ingresos anuales de todos los miembros de su unidad económica de convivencia tienen que ser inferiores a determinadas cuantías.
Así, estas pensiones son gestionadas por los órganos competentes de cada Comunidad Autónoma, así como por las Direcciones provinciales del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO) en las ciudades de Ceuta y Melilla.