Aunque el virus de la lengua azul no es desconocido en España –circula desde 1998–, el nuevo foco detectado en Portugal, que se ha extendido a Badajoz y Huelva, preocupa a ganaderos y autoridades sanitarias al tratarse de un nuevo serotipo del virus, el número 3, que tiene una morbilidad muy alta, es decir que puede afectar a todo el rebaño, y una mortalidad del 30%.
La lengua azul es una enfermedad vírica transmitida por la picadura de ciertas especies de mosquitos del género Culicoides. Afecta a los rumiantes, tanto domésticos como salvajes, aunque los más afectados son los ovinos, con síntomas que van desde la pérdida de peso y la lana, hasta la muerte. No obstante, la gravedad varía dependiendo del serotipo. Se han identificado 24 distintos, aunque en España circulan el 1, el 2, el 4 y el 8.
La comunidad andaluza es zona restringida para serotipos 1 y 4, y se utiliza una vacuna bivalente para la inmunización del ganado. De hecho, este verano hubo un brote importante y la Junta de Andalucía tuvo que comprar vacunas por valor de un millón de euros.
Ahora, por primera vez, se ha detectado en Andalucía el serotipo 3, después de que la semana pasada las autoridades lusas dieran la voz de alerta al detectar su presencia en el país. En nuestras fronteras, se han identificado dos focos del serotipo 3 de lengua azul, muy cerca de la frontera en dos pueblos de Badajoz y en el municipio onubense de Rosal de la Frontera. Para que no se extienda la enfermedad, el Ministerio de Agricultura ha enviado 170.000 vacunas del serotipo 3, un lote que la Junta de Andalucía completará con 970.000 dosis más.
Además, desde el Ministerio de Agricultura, se ha decretado un área restringida frente al serotipo 3 de unos 150 kilómetros, que impide la movilidad de la cabaña ganadera fuera de ella. Se consideran zonas restringidas en Andalucía la provincia de Huelva y las comarcas sevillanas de Cazalla de la Sierra (Sierra Norte), Cantillana (Vega de Sevilla) y Sanlúcar la Mayor (Poniente de Sevilla).
«Tenemos mucha incertidumbre porque vamos a tardar en vender y hay mucho malestar en las explotaciones», apunta el secretario provincial de COAG en Huelva, Enrique Acción. Acción explica que las primeras vacunas se están destinando a inmunizar a las ovejas, ya que son las que sufren en mayor medida la enfermedad. «Como no hay muchas dosis, primero se vacunarán a las ovejas y después a los corderos de 1 a 3 meses, esto es algo nuevo, y desde COAG pedimos que a los terneros también se les vacune en el plazo de un mes para que puedan salir a la venta».
Como se ha decretado la zona restringida, la cabaña ganadera de Huelva solo puede moverse por la provincia. Para que pueda salir, el delegado de COAG explica que «primero hay que rociarle un antimosquito y a los 14 días hacerle una prueba PCR para garantizar que está libre del virus». «Nosotros solemos vender el vacuno a Salamanca y Lorca y está todo paralizado, por eso pedimos que se pueda vacunar a los terneros a corto plazo”.
Desde COAG insisten en lanzar un mensaje de tranquilidad a los consumidores, ya que el virus de la lengua azul no se transmite a personas y, además, existen las máximas garantías sanitarias. «Ahora más que nunca las garantías son máximas porque los controles para la movilidad y venta del ganado son exhaustivo, los productos son inmejorables».