Con la llegada de octubre, muchos conductores preocupados por la DGT comienzan a revisar las fechas de vencimiento de la ITV de sus vehículos. Las sanciones son severas y las autoridades no suelen mostrar indulgencia. Además, si un problema es detectado durante la inspección, el automóvil deberá ser llevado al taller, lo que implica tiempo y dinero.
Aunque renovar la ITV no es un proceso complicado, puede generar mucha inquietud, especialmente para aquellos que conducen coches con varios años de uso y a los que suelen aparecerles averías con frecuencia.
Incluso los propietarios de vehículos más nuevos deben estar atentos. Los primeros años en los que el coche está exento de la revisión pasan muy rápido, y cuando se quieren dar cuenta, deben pasar la inspección obligatoriamente. Si no lo hacen, aunque el coche haya tenido un uso limitado, se arriesgan a recibir sanciones.
¿Cómo es el calendario de la ITV?
La periodicidad de la ITV no es igual para todos los vehículos, ya que algunos deben someterse a revisiones con mayor frecuencia que otros. Sin embargo, también existen vehículos que están completamente exentos de este trámite de por vida.
Los automóviles con menos de 4 años desde su matriculación no requieren pasar la ITV. Una vez alcanzado el cuarto año, deben realizarla por primera vez. Entre los 4 y los 10 años de antigüedad, la inspección se lleva a cabo cada dos años. Cuando superan los 10 años, la revisión se vuelve anual.
En teoría, la normativa establece las pautas, pero en la práctica muchos conductores no las cumplen. Según la patronal de estaciones de ITV, alrededor del 30% del parque automotor circula con la ITV caducada.
¿Qué vehículos estarán exentos de la ITV de forma permanente?
A partir del 1 de octubre, entrará en vigor una exención permanente para ciertos tipos de vehículos. Los automóviles con más de 60 años y que estén catalogados como Vehículos Históricos ya no tendrán que pasar más la ITV. Esta exoneración también se extiende a motocicletas y ciclomotores antiguos.
El proyecto que establece un reconocimiento especial para estos vehículos busca proteger el patrimonio automotor español, que corre el riesgo de perderse si no se regula de forma adecuada. Para ello, los propietarios deben inscribir estos vehículos en un registro oficial de históricos, que certifique su valor y estado.
El nuevo reglamento, que se implementará en octubre, detalla los requisitos que un coche o motocicleta debe cumplir para ser considerado oficialmente como “histórico” y las condiciones bajo las que pueden circular. También especifica las normas relacionadas con la frecuencia de inspección técnica para los vehículos antiguos que no entren en esta categoría especial.
