En 2023, la inmigración en Aragón dejó un impacto económico positivo, según un informe de la Fundación Basilio Paraíso. Este estudio revela que la población inmigrante generó un superávit fiscal de 500 millones de euros. Más allá de su contribución económica, los inmigrantes han sido clave para frenar el declive demográfico en la región. Se espera que, para 2039, los inmigrantes representen casi el 30% de la población total de Aragón, frente al 17,4% actual.
Como se ha mencionado antes, este crecimiento ha sido indispensable para contrarrestar el descenso de la población nacional, que ha caído un 5% desde 2017. En cambio, la población extranjera ha aumentado en un 411% desde 2002, con la inmigración convirtiéndose en el principal motor demográfico de la comunidad. Aragón, como muchas otras regiones, enfrenta el desafío del envejecimiento de su población, con una tasa cada vez mayor de inactivos en comparación con trabajadores activos entre los nativos.
El mercado laboral aragonés
El informe destaca que el 15,4% del mercado laboral en Aragón está compuesto por inmigrantes, quienes desempeñan un papel fundamental en sectores como la agricultura, el comercio, la hostelería y el empleo doméstico. Estas áreas suelen experimentar escasez de trabajadores nacionales, y los inmigrantes han cubierto estas vacantes de manera efectiva.
En términos de proporción, mientras que en 2023 había tres españoles inactivos por cada cuatro trabajadores activos, entre los inmigrantes con doble nacionalidad la proporción era significativamente menor: solo un inactivo por cada cuatro activos. Estos datos desmontan algunos de los estereotipos negativos sobre la inmigración, como la idea de que los inmigrantes no contribuyen al sistema económico. Por el contrario, la evidencia demuestra que la mayoría de ellos llegan a Aragón con la intención de trabajar y participar activamente en la economía local.
Los aporte fiscales de los inmigrantes
Además de su impacto en el mercado laboral, los inmigrantes también han contribuido significativamente a las arcas públicas a través de sus aportaciones fiscales. Gracias a su alta tasa de empleo, la contribución neta de los inmigrantes al sistema fiscal ha sido considerablemente positiva. El informe subraya que, aunque las cifras económicas son importantes, el valor de la inmigración no debe reducirse únicamente a su impacto fiscal. Los inmigrantes han ayudado a revitalizar comunidades y mantener vivas industrias clave en Aragón.
El documento también invita a reflexionar sobre las políticas migratorias y la necesidad de un enfoque más inclusivo. En lugar de demonizar a la inmigración, como lo hacen ciertos discursos políticos, el informe sugiere que se debe reconocer la valiosa contribución de los inmigrantes a la economía y la sociedad aragonesa. La creciente diversidad demográfica en Aragón no solo es una realidad inevitable, sino también una oportunidad para seguir fortaleciendo la economía y revitalizando la región.
