Víctor de Aldama, el empresario señalado como el presunto “conseguidor” en los contratos públicos bajo sospecha por comisiones ilegales que se investigan en el “caso Koldo”, ha dirigido un escrito a la Audiencia Nacional (AN) para pedir que se desbloqueen parcialmente sus cuentas bancarias.
Sus fondos llevan embargados desde el pasado 19 de febrero tras el estallido del escándalo de las presuntas “mordidas” en la venta de mascarillas al Ministerio de Transportes que entonces dirigía José Luis Ábalos.
El empresario reclama al magistrado instructor, Ismael Moreno, que lo autorice para que pueda ingresar el dinero que ha obtenido, de momento, con la venta de las participaciones que ostentaba en el Zamora Club de Fútbol, del que era hasta ahora máximo accionista.
La sociedad anónima deportiva zamorana pasará así a manos de Javier Páez, sobrino del histórico presidente del Betis Manuel Ruiz de Lopera, recientemente desaparecido.
Concretamente, solicita que se descongelen los fondos bancarias a nombre de una de sus empresas para ingresar tres pagarés recibidos -hasta ahora- por la compraventa de sus acciones, cada uno de 12.179,57 euros, lo que eleva el montante total de la transacción a los más de 36.000 euros.
