La decisión del Tribunal Superior de Justicia de la UE (TJUE) sobre la no prescripción de los gastos hipotecarios ha provocado una avalancha de reclamaciones por este asunto ante el Banco de España. Esto ha abierto la puerta a que los millones de clientes bancarios que han firmado una hipoteca puedan pedir a las entidades que les abonen los gatos de gestión que tradicionalmente soportaba el consumidor. El regulador bancario español ha registrado hasta junio 40.000 peticiones de rectificación, un 60% motivadas por los préstamos hipotecarios, de acuerdo a la Memoria de Reclamaciones de 2023, publicada este miércoles.
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