Tras varios días de fuerte calor, los castellanos y leoneses tendrán que recuperar el paraguas y el chubasquero. Y es que según alerta la Agencia Estatal de Metereología (Aemet) las altas temperaturas darán paso a una DANA inestable que provocará tormentas localmente fuertes, que pueden ir acompañadas de granizo en la zona noroeste de Castilla y León. Las localidades más afectads por esta inclemencia meteorológica serán la burgalesa de Aranda de Duero y la vallisoletana de Medina de Rioseco.
Además los cielos de la Comunidad tendrán una
nubosidad alta, que pasará a ser baja en el extremo norte, y de evolución por
todas las zonas, especialmente en el oeste. Además, no se descartan brumas y
bancos de niebla en la zona Cantábrica.
En cuanto a las temperaturas seguirán en ligero ascenso en
las capitales de provincia, que irán descendiendo según avance la jornada, como
consecuencia de la humedad que puede provocar las tormentas.
Las mínimas en las ciudades oscilarán entre los 13 grados de
Burgos; los 15 de Palencia, Segovia y Soria; los 16 de Ávila, los 17 de León; y
los 19 de Salamanca, Valladolid y Zamora.
En cuanto a las máximas, todas las capitales, excepto Burgos, superarán los 30 grados, ya que la capital burgalesa tendrá 29. El resto
oscilarán entre los 30 grados de Ávila y León; los 31 de Segovia; los 32 de
Palencia, Salamanca y Zamora; y los 33 de Soria. En Valladolid se registrarán
las temperaturas más altas, ya que se pueden alcanzar los 34 grados.
Está será la tónica durante todo el fin de semana en
Castilla y León, con altas temperaturas, con fuertes tormentas, que también va
a provocar la aparición de rayos que mantendrá en alerta al operativo contra
incendios de la Comunidad, ya que también se esperan vientos del nordeste y
este, con algunas rachas fuertes.
