Situado en Cala Reona, una de las playas más espectaculares –y desconocidas– de Cabo de Palos, de aguas cristalinas y que cuenta con una de las reservas marinas más importantes del Mediterráneo. En este restaurante podemos disfrutar de comida local a muy buen precio, con vistas al Parque de Calblanque, una de las mayores joyas naturales de la Región de Murcia con pequeñas calas de arena dorada y ocres junto con dunas fósiles, blacas salinas y macizos montañosos que contrastan con el azul del mar. El chiringuito «Al lío», regentado por Francisco Trigo, jefe de cocina, y Liborio Saura, se ha convertido en un referente gastronómico para los amantes de la cocina mediterránea que quieran disfrutar de una exquisita velada o almuerzo en familia a orillas del mar. No decepciona.
Con un ambiente informal, pero cuidado, destaca por sus productos de máxima calidad, procedentes de las lonjas de Cartagena, y su buena elaboración, directamente del mar a la mesa. Para abrir el apetito, los caballitos con salsa romescu y su marinera especial con anguila ahumada y wakame. Brutal. Destaca en paellas, pescados y mariscos. Trabajan la mar con ahinco y lo único congelado son las cervezas Alhambra, ideales a -5ºC. Especial atención con el dentón, el mero al horno y los arroces y, en concreto, el arroz Al lío, con pulpo y letones, y el arroz caldero, el clásico de Cabo de Palos y uno de los platos estrella de la gastronomía murciana. También atraen a locales y foráneos sus croquetas de Gallo Pedro y las gambas XXL al ajillo. Para terminar, un granizado de café asiático, invento propio de este chiringuito, su «best seller» de cada verano. En suma, una grata sorpresa a pie de
playa donde es imprescindible reservar.