Alga asiática: «Estamos ante una amenaza total»

Alga asiática: «Estamos ante una amenaza total»

La provincia de Cádiz ha vuelto a dejar claro este verano que es uno de los grandes destinos de moda a escala nacional. Playas de ensueño, grandes conciertos, pueblos con encanto, una oferta gastronómica calificada como la mejor de España por un chef del prestigio de José Andrés y un sinfín de fiestas y atractivos culturales y de ocio han hecho que haya vuelto a atraer la atención de miles de visitantes.

De ello hablan los niveles medios de ocupación alcanzados por los establecimientos hoteleros de la costa y Jerez de la Frontera, por encima del 90% (agosto alcanzó el 91,58, frente al 89,13% del mismo periodo de 2023), o los afiliados del sector Servicios a la Seguridad Social, 62.476 en julio (un 2% más que en el mismo mes del año pasado).

Pese a ello y con unas previsiones de ocupación para este mes de septiembre también muy positivas (81,45%), sectores como el hostelero y algunos ayuntamientos de la costa gaditana han elevado el tono de su nivel de preocupación por las consecuencias que para el destino podría tener a corto o medio plazo un «enemigo» que este año se ha vuelto a dejar notar con fuerza en las playas, en especial en las de la Comarca del Campo de Gibraltar.

Se trata del alga asiática, Rugolopteryx okamurae, cuyos arribazones se han convertido en una auténtica pesadilla en playas tan emblemáticas y demandadas por el turismo como las de Tarifa, en las que, poco antes de que finalizara el pasado mes de agosto, su ayuntamiento ya había retirado más de 9.000 toneladas.

Aunque, al menos por el momento, no existe un clamor preocupante por parte de los turistas que eligen la costa de Cádiz para pasar sus vacaciones y el alga no se ha hecho notar en toda la zona litoral (en municipios turísticos como Chiclana, el más potente de la costa, su incidencia es mínima o nula), lo cierto es que los comentarios sobre los inconvenientes que plantea son cada vez más numerosos.

«Sin lugar a dudas, han sido unos meses excelentes para el sector turístico, con niveles de ocupación muy elevados (destinos como Conil, Chipiona y Cádiz superaron el 94% en julio) y con datos muy positivos en lo que a la contratación en el sector servicios se refiere». «Y lo mejor», apunta Antonio de María, presidente de Horeca-Cádiz, «es que todo apunta a que la dinámica va a prolongarse; que vamos a seguir creciendo. Con mayor demanda de profesionales para poder cubrir las necesidades del destino».

Pese a su satisfacción, De María muestra su preocupación y la del sector por el avance del alga asiática, único «pero» de un verano «para enmarcar».

«Yo llevo alertando sobre el alga desde que aparecieran las primeras en la zona de Tarifa», señala. «En los últimos años», subraya, «no ha dejado de incrementar su presencia, metiéndose en playas tan complejas de ‘conquistar’ como La Caleta, haciendo visible su poder de expansión».

«Estamos ante un problema medioambiental, que está acabando con el fondo marino y que, obviamente, está afectando a las playas y, por ende, podría tener mayores consecuencias sobre el turismo», explica.

«Lo que no sé es que están esperando para darle una solución. Por ahora, lo que se está haciendo es retirar el alga, que es algo así como recoger con una fregona el agua de una tubería picada. Entendemos que, más allá de eso, en lo que hay que centrarse es en tapar el boquete de la tubería. Hay que ir directamente a que no se reproduzca».

«No hablamos», añade, «de un problema a futuro, ya está ahí y corremos el peligro de que acabe con el verano. Si la gente ve este plan, puede decir ‘no, yo para el año que viene no estoy dispuesto a esto», continúa.

«Estamos ante una amenaza total», sentencia el presidente de Horeca en la provincia de Cádiz.

Además de los inconvenientes que el alga asiática está generando a los bañistas, ésta, su presencia, ha vuelto a suponer (lo es aún) este verano un auténtico quebradero de cabeza económico para los ayuntamientos de las localidades más afectadas por esta invasión.

Tanto es así que poblaciones como Tarifa habían realizado hasta casi finales de agosto un desembolso que superaba los 100.000 euros, ya que a los costes de retirar el alga hay que sumar los derivados de su transporte al secadero y al vertedero.

Para afrontar esta importante carga económica, los ayuntamientos más afectados solo reciben ayuda de la Diputación Provincial de Cádiz, que este año ha destinado 140.000 euros a Tarifa; 92.000 a Barbate; 70.000 a La Línea de la Concepción, 20.000 a Algeciras y 18.000 a Conil de la Frontera.

Please follow and like us:
Pin Share