Apuntar a la cabeza

Apuntar a la cabeza

Es historia antigua, casi de abuelo plomazo y mesa camilla, que internet es la nieta sofisticada de Arpanet, una red militar descentralizada diseñada por el ejército estadounidense durante la Guerra Fría para asegurarse de que la destrucción de uno de sus nodos no impedía que la comunicación siguiese funcionando. Que las comunicaciones son esenciales en cualquier campaña militar es algo que también sabe cualquiera que haya visto El puente sobre el río Kwai. Por eso leo estupefacta, aunque no sorprendida, que la detención de Dúrov, CEO de Telegram, ha dejado al pairo las comunicaciones del ejército ruso que, como en un chiste de Gila, hacían uso de esta aplicación para las transmisiones de las operaciones sobre el terreno. Putin ha caído en la trampa de pensar que el propósito de estas plataformas era el suyo, que estaban a su servicio.

Seguir leyendo

Please follow and like us:
Pin Share