La pequeña localidad soriana de Arenillas acoge este sábado y mañana domingo la décima edición del Boina Fest, el festival de música que planta cara a la despoblación.
Un pequeño pueblo de apenas 25 vecinos que multiplica este fin de semana su población en un 25 por ciento gracias a un evento musical que cumple su novena edición y que sigue en constante crecimiento.
De hecho, según la organización se espera una asistencia superior a los 1.200 personas, el récord de otras ediciones.
El festival comenzará esta tarde a las 17 horas, y se alargará hasta las 05.00 horas de la mañana.
Al festival acudirán artistas como El Tío la Cartea. una banda valenciana que se rebela contra las injusticias sociales del mundo, con su “potente” sesión de vientos, la energía del rock y sus “peculiares” melodías; La Churry, interpretada por Gina Segura, que presentará su espectáculo de calle ‘Wooooow’, en donde una payasa sobre dos ruedas explicará a los asistentes el concepto de “modo de vida nivel Diosa”; Dj Unexpected, que repite tras sus sesiones en 2017, 2018 y 2019; y La Wawa, una pequeña caravana itinerante que tiene como objetivo garantizar que todos los niños de los pueblos tengan acceso a la cultura y al ocio.
Además, el festival también contará con la música en directo de los artistas de la España vaciada de este año: el ska punk de Oktopussy, representantes de Segovia; el flamenco fusión de Makaú, representantes de Soria; el hip-hop de La Chocabeat, representantes de Teruel; y el reggae rural de LAsia & Mendas del Cierzo, que representan a Castellón.
Todos ellos fueron elegidos de entre más de 200 artistas inscritos en la convocatoria lanzada por el festival a todos los artistas de las zonas más despobladas del país en donde apenas viven menos de ocho habitantes por kilómetro cuadrado.
Un festival de música gratuito que atrae cada año a miles de personas para disfrutar de un gran fin de semana, y que se ha convertido, con el paso de los años, en un evento de referencia para los que viven y trabajan en los pueblos y reivindican el modo y calidad de vida del medio rural.
Visibilizar y llamar la atención sobre el problema de la despoblación desde la generación de un espacio cultural para que los artistas de zonas poco pobladas de todo el país puedan darse a conocer, es uno de los objetivos de este singular festival.
Y es que este municipio es un símbolo en la lucha contra la despoblación por canto fue de los primeros pueblos, por no decir el primero, que se dio cuenta hace más de 40 años de lo que estaba empezando a pasar.
Arenillas, gracias a la implicación de sus vecinos, ha conseguido aumentar su población en los últimos años en los que han nacido hasta seis niños, posibilitando que la tasa de natalidad de la localidad multiplique ahora por cuatro la media de la provincia soriana.
El trabajo de este municipio en favor de sus gentes arrancaba en la década de los ochenta del pasado siglo cuando, de la mano de la Asociación Social y Cultural de Arenillas, formada por residentes y veraneantes, consiguieron con su esfuerzo y mucho sudor desde asfaltar todas las calles del pueblo con trabajos voluntarios hasta recuperar el oficio tradicional de la destilación de plantas aromáticas pasando por un albergue turístico.
