El 24 de junio de 2022, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos emitió una sentencia que anulaba el derecho al aborto y otorgaba a cada estado la potestad de establecer sus propias leyes sobre el aborto.
Aunque esta decisión jurídica afectó directamente a los derechos reproductivos de las mujeres y a su autonomía corporal, parece que también tuvo profundos efectos en los hombres. Numerosos medios de comunicación han informado de aumentos anecdóticos en el número de hombres que buscan métodos anticonceptivos permanentes tras este acontecimiento.
Un estudio publicado en el «International Journal of Impotence Research» describe por primera vez las tendencias en la consulta y realización de vasectomías en una gran organización sanitaria comparando a los hombres que acudían a la consulta de vasectomía en la era pre-sentencia con los que lo hacían en la era post. Tras esta decisión, el número de consultas y procedimientos de vasectomía aumentó significativamente.
Se demuestra por primera vez que los varones con potencial para causar embarazos también se han visto profundamente afectados, como reflejan sus decisiones en materia de salud reproductiva. Se observó un aumento de las consultas de vasectomía, particularmente entre los hombres más jóvenes, sobre todo menores de 30 años, y los hombres sin hijos.
Las conclusiones de este estudio evidencian claramente que los hombres siguen comprometidos con la autonomía reproductiva para sí mismos y para sus parejas, y son capaces de actuar rápidamente cuando se ven impulsados por estímulos externos. Las resoluciones jurídicas sobre salud reproductiva pueden tener repercusiones que trasciendan las fronteras del género. Los responsables políticos deberían tener esto en cuenta a la hora de la toma de decisiones médicas.
