Ben Gorham, el perfumista improbable

Ben Gorham, el perfumista improbable

Lo primero que dice Ben Gorham (Estocolmo, 47 años) después de saludar y darle la mano a todo el mundo es “estoy cansado”. “Hace una hora estaba bien, pero de pronto me ha caído encima el jet lag”, se justifica con una voz sorprendentemente suave mientras posa su cuerpo tatuado de casi dos metros sobre una silla de diseño. Alguien menciona la idea de un café como antídoto al sueño. “Se están ocupando”, contesta él aunque, a lo largo de la entrevista, el café no apareció en ningún momento.

Seguir leyendo