El huracán más temprano de la historia del Atlántico (es el primero de tal magnitud que se registra a principios de julio) sigue imparable su curso y deja las primeras víctimas humanas. Al menos siete personas han perdido la vida en la región del Caribe, tres de ellas en Venezuela, en el estado costero de Sucre, la misma zona en la que la vicepresidenta del país, Delcy Rodríguez, ha resultado herida después de que se cayera un árbol. En la isla de Granada, otras tres personas perdieron la vida cuando «Beryl» azotó la isla de Carriacou y Pequeña Martinica el pasado lunes, cuando la categoría del huracán aún estaba en el nivel 4. La isla Unión, a 90 kilómetros de Barbados y Carriacou, registraba también un fallecido, además de cifrar en un 90% las casas que se han visto afectadas por el tremendo fenómeno meteorológico.
Ahora, son las regiones de México y Jamaica las que se preparan, en la medida de lo posible, para lo peor.
El primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, avisaba desde ayer de la «inminente llegada» del huracán, con unas rachas de vientos de hasta 240 kilómetros por hora, lo que además provocará olas de entre dos y tres metros de altura. El portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, informaba de que siete agencias de Naciones Unidas en la región jamaicana van a ser reforzadas en los próximos días por equipos adicionales del organismo. Expresaba también una enorme preocupación por la región de Haití, puesto que el huracán se encontraba ayer cerca de la zona sur de este país, previo paso a Jamaica. La situación de la población haitiana ya es preocupante, debido a la ola de violencia y saqueos que sufre el país, que en los pasados meses de mayo y junio tuvo que cerrar el 40% de las instalaciones que ofrecen camas sanitarias. «La situación en Haití para nosotros es extremadamente preocupante. El país antes del huracán ya estaba en una situación calamitosa. La situación de seguridad no está mejorando. Nos estamos preposicionando, estamos listos para ayudar en cuanto llegue la tormenta y antes», añadía Dujarric en una rueda de prensa de la que se hace eco Ep.
El gobierno de México, por su parte, ha estimado que el huracán llegará a sus costas esta misma noche o en la madrugada del viernes, a través del estado de Quintana Roo, entre Tulum y Carillo Puerto. Quintana Roo, precisamente, es el principal destino turístico de México por albergar a Cancún y la Riviera Maya, y ya ha habilitado112 refugios temporales para albergar a casi 21.000 personas. Según los pronósticos, la región mexicana no solo tendrá un fin de semana complejo, sino también un inicio de semana, y es que tras cruzar la península de Yucatán y avanzar por el Golfo de México, Beryl tocaría tierra por segunda vez entre el domingo y el lunes, entre los estados de Veracruz y Tamaulipas, fronterizo con Estados Unidos. Para intentar paliar los estragos, las autoridades mexicanas han preparado un dispositivo que contempla más de 8.500 soldados y funcionarios, así como más de 155 vehículos de distintos cuerpos de seguridad. De los tres ciclones que ha habido en esta temporada en el Atlántico, Beryl sería el tercero en impactar en México, donde el domingo ya ingresó la tormenta Chris, que dejó inundaciones.
