Un grupo criminal dedicado a la sustracción de vehículos de alta gama y al robo con fuerza en establecimientos de Andalucía ha sido desarticulado en una operación conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil con la detención, de momento, de dos personas en la provincia de Sevilla.
Con la operación ‘Fisherman’ se tuvo conocimiento de la sucesión de una serie de hechos delictivos relacionados que se habrían llevado a cabo en la comunidad, han informado este jueves en un comunicado conjunto.
Se trataba de la sustracción de dos vehículos de alta gama en la provincia de Huelva y diversos robos con fuerza en varios establecimientos comerciales dedicados principalmente a la venta de ropa en las provincias de Sevilla y Málaga.
Los hechos se cometieron por un grupo criminal aparentemente compuesto por unas siete personas, que actuarían de manera concertada en la comisión de los delitos y con un claro reparto de tareas.
Unos hacían de conductores de los vehículos, otros se dedicaban a la apertura y acceso a los locales comerciales, y otros a guardar los efectos sustraídos.
Sistemas especializados
Los integrantes empleaban sistemas especializados para la apertura y arranque de los vehículos de alta gama que sustraían, les colocaban sistemas de seguimiento para poder localizarlos posteriormente y sustraerlos en el momento que fuera más oportuno.
El objetivo era utilizar estos vehículos de gran cilindrada en el traslado de los integrantes del grupo a los diferentes lugares donde llevaban a cabo las actividades ilícitas.
Esto les permitía huir a toda velocidad tras cometer los robos, con lo que ponían en grave riesgo al resto de usuarios de la vía.
Los asaltos se cometían en horarios nocturnos y siempre con prendas que cubrieran el rostro o guantes para ocultar su identidad y ‘sustraerse’ de la acción de la justicia.
Los agentes practicaron una entrada y registro en el principal domicilio investigado, ubicado en la localidad de Dos Hermanas donde se detuvo a dos personas presuntamente relacionadas con los hechos.
Estas pasaron posteriormente a disposición de la autoridad judicial, que decretó prisión para uno de ellos.
También se recuperaron los dos vehículos que figuraban como sustraídos, así como numerosos efectos, propiedad de los establecimientos violentados, que casi en su totalidad ya han sido entregados a sus dueños.
Según la Policía y la Guardia Civil, la investigación continúa abierta y no se descartan próximas detenciones.
