Donald Trump celebra sus 78 años con un partido republicano rendido ante él y una ventaja en las encuestas

Donald Trump celebra sus 78 años con un partido republicano rendido ante él y una ventaja en las encuestas

El expresidente Donald Trump llega a sus 78 años con una mochila cargada de causas legales. Entre las más graves se encuentra un veredicto de culpabilidad por falsificar registros comerciales para influir en las elecciones presidenciales, la espera de una sentencia y tres causas penales más en el horizonte, por no hablar de la millonaria multa que un juez le impuso por acosar sexualmente a la escritora E. Jean Carroll y luego difamarla. Compensando tanto problema legal, esta semana ha visto reforzada su posición política de líder de su partido. En un viaje a Washington, Trump ha regresado al Capitolio por primera vez tras el asalto del 6 de enero del 2021 y allí ha sido recibido con alabanzas y adulación incluso entre aquellos que nunca lo miraron con muy buenos ojos, como el líder republicano en el Senado, Mitch McDonnell, que hace tres años le acusó de provocar el asalto alimentando la turba con mentiras.

El desfile de cortejos que se vio este jueves en el Capitolio también es una muestra de que ningún o pocos colegas de partido le recriminan al expresidente sus cuestiones legales, su histrionismo en el escenario o su manera de actuar y gobernar, por lo que a sus ya 78 años Trump llegará a estas elecciones más reforzado que nunca. Tanto, que aprovecha cualquier ocasión para seguir recaudando fondos por su causa. Ayer organizó una fiesta de cumpleaños por todo lo alto en un espacio llamado Club 47 USA, en West Palm Beach (Florida) donde las entradas generales rondaban los 30 dólares y las de primera fila 60. Enseguida se colgó el cartel de completo porque los 5.000 tickets que se pusieron a la venta se agotaron rápidamente, según asegura el propietario del local donde tuvo lugar la celebración, Larry Snowden. En total se recaudaron por lo menos 150.000 dólares que posiblemente se utilicen para pagar los honorarios del equipo legal del exmandatario y las múltiples multas que se le han impuesto hasta el momento.

Donald Trump (78) tiene tres años menos que su rival demócrata Joe Biden (81), pero el tiempo pasa muy diferente para ambos. Mientras que el presidente y sus lapsus mentales y físicos están la mayoría de los días en la prensa, los de Trump, que también tiene algunos momentos de despiste (como cuando confundió a su rival en las primarias Nikki Haley con la presidente de la Cámara de representantes, Nancy Pelosi) pasan más desapercibidos. El exmandatario está más ágil mental y físicamente, pero aun así su edad preocupa a los votantes. Según una encuesta de ABC News/ Ipsos, a más de la mitad de los estadounidenses consultados les inquieta la avanzada edad de sus dos únicas opciones presidenciales. Además, según otra encuesta que Pew Research realizó en abril, el 62% de los entrevistados dijo que no confiaba en la aptitud mental de Biden y el 65% señaló que no creía en su capacidad física. Los resultados fueron más positivos para Trump, porque el 48% no confiaba en la aptitud mental del exmandatario y un 39% desconfiaba de la física.

Quizá lo más curioso es que tanto Biden como Trump han aprovechado las edades de su adversario para atacarse mutuamente. El equipo de campaña de Joe Biden ayer felicitaba al expresidente con un comunicado un tanto peculiar. Felicidades, Donald. Eres un delincuente, un fracaso, un fraude y una amenaza para nuestra democracia, nuestros derechos económicos y nuestro futuro. En nombre de Estados Unidos, nuestro regalo anticipado por tu 79 cumpleaños: asegurarnos de que nunca más seas presidente. El mensaje respondía a un email que el equipo de Trump había enviado horas antes y que recordaba como esta semana, durante la celebración del G7 en Italia, la presidenta Georgia Meloni tuvo que reconducir cariñosamente hacia el grupo a un desorientado Biden para hacerse una foto con el resto de los mandatarios mundiales. Sin embargo, hay una gran diferencia entre ambos candidatos, Trump cuenta con el apoyo acérrimo de gran parte de su partido, ahora más que nunca, pero en el caso de Biden no está tan claro. Los votantes republicanos no se plantean un líder más joven, pero en el lado demócrata muchos legisladores están preocupados. Son conscientes de que la edad de su candidato podría restarles apoyo en las urnas, y lo peor es que de momento no ha habido ninguna opción fuerte y joven que permita dar paso a las nuevas generaciones.

Además, los tropiezos de Trump suelen pasar más desapercibidos porque tiene la suerte de que Biden no ha convertido cada error de su adversario en carnaza, un tipo de ataque que el republicano sí suele aprovechar. Por eso todas las miradas están centradas en la noche del 27 de junio, cuando tendrá lugar en Atlanta el primer debate presidencial entre ambos candidatos. Los años, y cómo afecta el paso de ellos a cada uno, serán temas que seguro se tratan. Y todo, a pocos días de que el republicano acepte oficialmente en Milwaukee la nominación de su partido como candidato presidencial por tercera vez.