l Ayuntamiento de Barcelona ha cerrado este miércoles 6 de las 11 paradas de los antiguos pajareros de la Rambla, después de haber recibido la autorización judicial para hacer la recuperación forzosa de los establecimientos.
En cuanto a las cinco paradas restantes, que pertenecen todas a un mismo propietario, se está a la espera de recibir la autorización judicial por parte de otro juzgado para poder proceder del mismo modo, han informado desde el consistorio.
Esto ocurre tras la solicitud de desalojo por vía judicial realizada por el Ayuntamiento, después de que los responsables de estas paradas no aceptaran la petición del gobierno municipal, el pasado mes de julio, de entregar voluntariamente las llaves de los establecimientos.
A partir de ahora, el ayuntamiento estudiará el momento más adecuado para el derribo de las paradas, que estará sujeto a cómo evolucionen las obras de reforma de la Rambla.
Los antiguos pajareros dejaron de vender animales el 2009 y se reconvirtieron en paradas de venta de helados, dulces y recuerdos, entre otros productos.
En el Plan Especial de Ordenación de la Rambla, aprobado en 2016, no se contemplaba la continuidad de estas paradas y en 2021 se extinguieron formalmente las licencias.
A partir de allí comenzó un proceso judicial que tuvo diversas instancias y que en su totalidad han sido favorables al Ayuntamiento de Barcelona.
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