El Cerrato palentino se postula para acoger y dar futuro al lince ibérico

El Cerrato palentino se postula para acoger y dar futuro al lince ibérico

Poco a poco, sin prisa pero sin pausa, la Junta sigue avanzando en el proyecto de reintroducción del lince en Castilla y León.

La Consejería de Medio Ambiente sigue buscando áreas con elevada densidad de conejos en zonas con hábitat adecuado para que la población de este felino pueda prosperar, pero también que sean lugares donde no haya riesgo de atropellos en carreteras u otras posibles causas de mortalidad de este animal que daría al traste con su reintroducción.

De momento, dos son las zonas de la Comunidad que aspiran a tener el año que viene los primeros linces dentro del proyecto del Gobierno de España: los Cañones del Duero, en la provincia de Zamora, y el Cerrato palentino, que el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, visitaba este lunes para mantener en Astudillo una reunión con alcaldes de la zona y agentes afectados por el proyecto «Life LynxConnect» para la reintroducción del linde ibérico.

«Es una oportunidad que hay que aprovechar debido a su aportación al equilibrio de la cadena trófica ante la superpoblación de conejos, principal presa del depredador», destacaba el consejero, quien explicaba que la concesión del proyecto supondría, además, una inyección económica inicial de unos dos millones de euros, que iría acompañada de inversiones permanentes de futuro”, así como una posible atracción turística para la zona.

Suárez-Quiñones, además, aseguraba que la caza, sector a priori menos favorable al proyecto por la disminución de ejemplares de conejo que supondría, también se podría ver beneficiada al mejorar el hábitat de la perdiz.

En septiembre de este año está previsto finalizar la ejecución del resto de trabajos preparatorios centrados en determinar la valoración de la actitud social ante el proyecto de reintroducción, el establecimiento de acuerdos de colaboración con propietarios de fincas, la evaluación del riesgo de atropellos en las carreteras y de otras posibles causas de mortalidad no natural, y la recogida de datos sanitarios sobre prevalencia de enfermedades en las especies de fauna que puedan convivir con el lince.

Para el desarrollo de estas actuaciones de mejora de hábitats en las zonas donde finalmente se produzca la reintroducción del lince, la Junta tiene ya planificada una inversión de un millón de euros, que se destinará a mejoras de hábitats en los cotos, fincas y montes de utilidad pública. Otras actuaciones que se están estudiando en estos momentos son las relacionadas con la reducción de la mortalidad no natural por atropellos o ahogamientos en canales de riego.

De forma complementaria a estas actuaciones de mejora de hábitats y reducción de mortalidad, la Junta está avanzando en la redacción de proyectos de infraestructuras y suministros necesarios para que la reintroducción del lince en Castilla y León sea una realidad.

Entre otras cosas, se adquirirán jaulas, material veterinario y collares para seguimiento GPS de los ejemplares a reintroducir.

También se habilitarán recintos de aclimatación o presuelta ya que las primeras liberaciones de los ejemplares de lince procedente de los centros de cría no se suelen realizar directamente en el medio natural, sino que se construyen unos recintos en el monte, en las zonas de mejora de calidad de hábitat, con vigilancia 24 horas, donde permanecen aproximadamente un mes hasta su liberación en el medio natural mejorando así el éxito de las liberaciones.

La Junta tiene en una fase avanzada de redacción la construcción de dos recintos, uno por área. También se trabaja en mudas de cuarentena, que son infraestructuras complementarias para el desarrollo del proyecto de reintroducción que permitirán la realización de los chequeos sanitarios a los ejemplares a liberar o a los ejemplares reintroducidos si se les detectara alguna enfermedad en los trabajos de seguimiento en campo.

Actualmente, la Junta se encuentra en la redacción del proyecto de construcción de ocho mudas de cuarentena en las instalaciones del CRAS de Valladolid.

El lince es uno de los felinos más amenazados y en Castilla y León desaparecieron a finales de los años 80 del pasado siglo. Aunque la situación en España ha mejorado, en el último censo en la península Ibérica de 2024, se estima una población de algo más de 2.000 ejemplares.

Please follow and like us:
Pin Share