La costa mediterránea es uno de los principales lugares en los que los turistas se fijan para pasar unos días de vacaciones. Buen tiempo, playa, arena, una gastronomía única y un ambiente inigualable han convertido a gran parte del litoral de la Comunidad Valenciana en todo un sueño para quienes buscan descansar, disfrutar de la naturaleza y, además, sumarle zonas de ocio.
Uno de esos enclaves, que además ha sido bendecido con la recomendación del periódico británico The Sun, se encuentra en la zona alicantina, y sus calas se han erigido como un uno de los principales atractivos turísticos para los amantes del mar y la playa. Se trata de la localidad de Jávea, que con sus aguas cristalinas y su clima moderado convierten a este rincón en uno de los más amados de la geografía nacional.
Jávea se encuentra muy bien protegida gracias al Parque natural del Macizo del Montgó, y las playas han convertido este lugar en uno de los más buscados por los amantes de la naturaleza y el bienestar.
Entre los lugares más destacados, tal y como recomienda la propia web de turismo de la Comunidad Valenciana, son la conocida y “obligatoria” Cala del Portitxol, para la que se puede realizar una visita al islote y su conocida y famosa puerta azul. También añade a la lista la cala Sardinera o la de la Granadella, así como la del Tangó, la del Francés o la de Ambolo.
Pero más allá de las playas, el municipio también destaca por sus calles y su entorno, toda la magia que albergan sus muros y rincones, hacen de este lugar uno de los más destacados de la provincia de Alicante. De hecho, uno de los puntos imprescindibles en la visita es la subida al Mirador de les Pesqueres, o también incluso hacer la ruta de los miradores, hasta llegar a un monumento conocido como la Séquia de la “Noria”.
Y para poner el broche de oro a esta localidad, que ha enamorado a los británicos de The Sun, se encuentra toda la amplia oferta culinaria y gastronómica que se encuentra en esta localidad costera. Los pescados, gambas y arroces son algunos de los platos más destacados, gracias a la buena calidad de los productos de la zona que, sin duda, componen una de las experiencias más llamativas del turismo en esta ciudad.
Un enclave único que, mucho antes de encandilar a los británicos, había conseguido conquistar a gran parte de la ciudadanía tanto española como valenciana.
