El próximo cinco de octubre, la cineasta Ana Navasquillo recibirá un galardón muy especial, el premio “Espíritu Guerrero. Arte y Cultura”, en una cena de gala que se celebrará en Madrid. Se le otorgará el premio al mejor largometraje por “El retorno”, un thriller psicológico en el que su protagonista crea en el espectador tensión y confusión a partes iguales, ya que no se sabe la realidad del personaje hasta el final de la película.
La trama gira en torno a una mujer que habla sola, aunque intenta aparentar que su interlocutora es una hija que no aparece en escena. Los que la ven dialogar consigo misma por la calle se sorprenden de una actitud incomprensible. En su casa suceden fenómenos extraños, la luz se apaga de repente, las piezas de ajedrez se mueven solas, suenan ruidos que no se sabe de dónde vienen… Cuesta entender lo que está pasando. Otros trabajos de Navasquillo en el campo que nos ocupa son el cortometraje “El pacto”, la obra teatral “La vidente” y el filme “Robert”, en el que el personaje principal es un muñeco diabólico.
La actriz y directora mostró ayer su alegría por esta distinción. “Es un reconocimiento y se agradece”, expresó. Los otros premiados en esta quinta edición son Fran Valenzuela, en música; Karlos Granada, mejor actor; Natalia Vivero, artista revelación; Mercedes Marín, mejor novela narrativa por “La resurrección de Jandra Sweet”; Daniel Esteve, labor social; Helena Bianco, trayectoria musical; Miguel 925, mejor showman; Francisco Javier Hernández, trayectoria marcial, y Samuel Vázquez, por su defensa de los derechos civiles.
