El fenómeno Milei triunfa en Silicon Valley

El fenómeno Milei triunfa en Silicon Valley

El fenómeno Javier Milei triunfa en Silicon Valley. Pocos mandatarios internacionales consiguen reunirse con los líderes de las gigantes tecnológicas en un espacio de tiempo tan reducido. Sólo el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salmán, generó una expectación similar con su primera visita a la bahía de San Francisco en búsqueda de inversiones en 2016.

El presidente argentino despegó el lunes rumbo a California para mantener varios encuentros a lo largo de la semana con la flor y nata de Silicon Valley. Una maratón de reuniones con los directivos y altos ejecutivos de empresas como Apple, Google, OpenAI o Meta. Mark Zuckerberg, fundador y director general de esta última, fue el último en recibirle en la tarde del jueves en la sede de la compañía, y este viernes hace escala en El Salvador para asistir a la toma de posesión del presidente Nayib Bukele.

El objetivo de Milei pasa por convertir a su país en una referencia de las tecnologías avanzadas, un polo en materia de Inteligencia Artificial (IA) sin las regulaciones exigidas en Estados Unidos o la Unión Europea. Con la denominada Ley Bases, que sigue tramitándose en la Cámara de Diputados, el mandatario ultraliberal impulsa el llamado RIGI (Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones), una iniciativa que ofrece un marco legal de incentivos impositivos, aduaneros y cambiarios para atraer proyectos de inversión superiores a los 200 millones de dólares.

Los inversionistas siguen con atención el trámite de esa ley, que pretende generar un ambiente de seguridad jurídica que fomente la llegada de capital extranjero y nacional.

Es la cuarta vez que Milei viaja a Estados Unidos desde que asumió la presidencia en diciembre del pasado año, y su séptimo desplazamiento internacional. Ya se reunió hace tres meses con el magnate Elon Musk en las instalaciones de la gigafactoría de Tesla en Austin, en el estado de Texas. En esta ocasión, Milei estableció su centro de operaciones en el Rosewood Sand Hill en Menlo Park, según informa Efe. Un hotel de lujo cuyo precio por noche ronda entre los 800 y 1.500 dólares, precio que sobrepasa varias veces el salario medio en Argentina. Allí recibió a figuras como Sam Altman, el consejero delegado de la empresa de inteligencia artificial OpenAI, mente detrás ChatGPT o Worldcoin, un sistema de recolección de datos biométricos basado en tecnología blockchain, prohibido en algunos países europeos.

Milei no viajó sólo; lo hizo acompañado por su ministro de Economía, Luis Caputo, el embajador argentino en Washington, Gerardo Werthein, su asesor en materia económica, Demien Reidel y el hacker y emprendedor Mat Travizano. Cenaron, entre otros, con el cofundador y presidente de OpenAI, Greg Brockman, el fundador y cabeza de Scale AI, Alexandr Wang, o el vicepresidente en IA de Apple, John Giannandrea.

«Esta cena no solo marcó un momento clave en el diálogo sobre la desregulación y la economía, sino que también fortaleció los lazos entre Argentina y la comunidad tecnológica internacional, abriendo nuevas oportunidades para futuras colaboraciones y desarrollos», indicó el portavoz de la Presidencia, Manuel Adorni.