Por fin hoy miércoles, con casi ocho meses de retraso respecto a las promesas de la Ley de Memoria Democrática, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha presentado el inventario más esperado por tantas familias castigadas por el franquismo: la investigación de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes ha documentado que 5.126 piezas, entre lienzos, joyas, cerámicas, esculturas, muebles u otros objetos incluidos en las colecciones de los museos estatales gestionados por Cultura proceden principalmente de incautaciones realizadas por la República para salvaguardar los bienes artísticos durante la Guerra Civil, que nunca fueron devueltos a sus dueños por la dictadura cuando acabó el conflicto. Muchos terminaron en museos, pero también universidades y distintos edificios públicos. Lejos, en todo caso, de sus propietarios.
El Gobierno publica un inventario de 5.000 piezas expoliadas por el franquismo con ocho meses de retraso
