El legado romano de Aragón: ciudades antiguas que aún fascinan

El legado romano de Aragón: ciudades antiguas que aún fascinan

Aragón, situado estratégicamente entre el Mediterráneo y el Cantábrico, así como entre los Pirineos y la Meseta Central, ha sido un cruce de caminos y un lugar de encuentro para múltiples culturas a lo largo de la historia. Una de las civilizaciones que dejaron una huella indeleble en este territorio fue la romana. Aunque es la ciudad romana más conocida y relevante, la romanización de Aragón fue extensa, con una red de ciudades, calzadas e infraestructuras impresionantes que aún hoy nos hablan de esa época de esplendor.

¿Cuáles son las principales ciudades romanas qué estuvieron en Aragón?

La ciudades más importantes en la época del Imperio Romano, todavía tienen un papel destacado en la actualidad, sobre todo en esta comunidad, aunque otras ya desaparecieron y son solo un recuero de una época resplandeciente que terminó para siempre. Entre las ciudades más importantes de la época destacan las siguientes:

Bilbilis: la joya arqueológica

Bilbilis, situada cerca de la actual Calatayud, es una de las ciudades romanas más fascinantes de Aragón. Fundada sobre un asentamiento celtíbero, Bilbilis se convirtió en una ciudad próspera durante la época romana, destacando por su impresionante teatro con capacidad para 4,600 espectadores y una compleja red hidráulica. Sin embargo, a partir de la época de Trajano, la ciudad entró en un periodo de decadencia, siendo finalmente abandonada a finales del siglo IV o inicios del siglo V.

El triángulo del Moncayo: Turiaso, Bursau y Mallén

En el entorno del Moncayo se encuentran tres localidades romanas de gran importancia: Turiaso (Tarazona), Bursau (Borja) y el yacimiento conocido como El Convento en Mallén. Estos lugares han dejado valiosos restos arqueológicos que demuestran su relevancia durante la dominación romana. Cada una de estas ciudades jugó un papel significativo en la estructura administrativa y económica de la región.

Arcóbriga: la ciudad Celtíbera Romanizada

Situada en el Cerro del Villar, cercano a Monreal de Ariza, Arcóbriga fue una ciudad celtíbera que experimentó una significativa romanización en el siglo I d.C. Contaba con foro, teatro y termas, reflejando la típica estructura urbana romana. Sin embargo, fue abandonada en el siglo III d.C. debido a las guerras civiles y crisis monetaria que afectaron al Imperio Romano.

Los Bañales: una ciudad monumental en las cinco villas

Los Bañales, ubicada en el término municipal de Uncastillo, es otro de los enclaves romanos destacados de Aragón. Con una extensión de aproximadamente 20 hectáreas, esta ciudad contaba con un foro, un templo, monumentales termas y un acueducto formado por 32 pilares. Los restos encontrados revelan la sofisticación y desarrollo urbano que alcanzó esta ciudad en su época de mayor esplendor.

Lepida Celsa: la colonia pionera del Valle del Ebro

Antes de la fundación de Caesar Augusta, Lepida Celsa, situada en Velilla de Ebro, fue la principal colonia romana en el Valle del Ebro. Recientemente, se han descubierto los restos del foro en la plaza mayor de Velilla, lo que subraya la importancia de esta ciudad en los primeros tiempos de la romanización de Aragón.

Contrebia Belaisca: un centro administrativo en Botorrita

Al sur de Zaragoza, en Botorrita, se encuentra Contrebia Belaisca, un sitio arqueológico de gran importancia. Esta ciudad fue un centro administrativo relevante, y en el yacimiento del Cabezo de las Minas se hallaron los famosos Bronces de Botorrita, documentos en bronce del siglo I a.C. que registran un pleito entre los habitantes de Salduie (Zaragoza) y Alaun (Alagón).

Iaca: la guardia del Pirineo

En la provincia de Huesca, Iaca (la actual Jaca) fue una ciudad clave durante la época romana. Como ceca y centro económico, Iaca jugó un papel crucial en la protección de las rutas que cruzaban los Pirineos. Sin embargo, en el siglo IV, la ciudad entró en decadencia debido a los ataques de bandidos que asolaban las rutas comerciales.

Labitolosa: una ciudad en La Puebla de Castro

Finalmente, Labitolosa, situada en La Puebla de Castro, se desarrolló entre el siglo I a.C. y finales del siglo II d.C. Las excavaciones arqueológicas han revelado el foro, incluyendo una curia excepcionalmente bien conservada, dos edificios termales y una domus, ofreciendo una visión detallada de la vida en esta ciudad romana.

Aragón, con su rica historia y estratégica ubicación, fue un epicentro de la romanización en la península ibérica. Las ciudades mencionadas no solo reflejan el esplendor de la época romana, sino también la duradera influencia de esta civilización en la región. Explorarlas nos permite comprender mejor el legado romano y su impacto duradero en la historia y cultura de Aragón.