Un nuevo gel anticonceptivo para hombres ha sorprendido. Esta opción para el control de la natalidad masculina podría ser aún más atractiva de lo que se esperaba. Así lo sugiere una investigación preliminar presentada el domingo, en la reunión anual de la Sociedad de Endocrinología (ENDO 2024), en Boston. Lo primero que sorprende de este gel es que se aplica una vez al día en los hombros. Lo segundo, algo que ha llamado la atención de la industria, es que suprime la producción de esperma en cuestión de semanas. Esto es mucho más rápido que otros métodos similares basados en hormonas.
El gel se está desarrollando con la ayuda de varias organizaciones, algunas dependientes del Gobierno de Estados Unidos. Por ahora, se está probando en un ensayo clínico multicéntrico de fase 2B, que incluye unas 400 parejas sexuales. Aunque el estudio se encuentra en curso, el equipo científico que lo lidera ya ha comenzado a hacer públicas sus primeras conclusiones, proporcionando resultados más que alentadores.
El nuevo gel anticonceptivo para hombres se llama NES/Tgel y su nombre nace de la combinación de dos hormonas: nestorona y testosterona. La testosterona por sí sola disminuye la producción de esperma. Su secreto consiste en añadir la nestorona, que es una versión sintética de progesterona y un ingrediente de algunos anillos anticonceptivos vaginales.
Además, la progesterona es una hormona que desempeña un papel importante en la regulación del embarazo, en el ciclo menstrual femenino y que se usa en anticonceptivos para mujeres. Con ella, según este estudio, los resultados en hombres se aceleran. Esto hace que se necesite utilizar menos testosterona.
«El desarrollo de un método anticonceptivo seguro, altamente eficaz y reversible de forma fiable para los hombres es una necesidad insatisfecha», contextualiza la doctora Diana Blithe, jefa del Programa de Desarrollo de Anticonceptivos en los Institutos Nacionales de Salud en Maryland y la investigadora principal del ensayo. De todas las opciones de planificación familiar en el mercado, solo dos son para hombres: el preservativo y la vasectomía. Aún no hay una píldora o un gel anticonceptivo masculino.
«Aunque los estudios han demostrado que algunos agentes hormonales pueden ser eficaces para la anticoncepción masculina, pero el lento inicio de la supresión espermatogénica es una limitación». Estudios anteriores sobre anticonceptivos hormonales masculinos administrados mediante inyecciones mostraron una mediana de tiempo de entre 9 y 15 semanas para que se suprimiera la producción de esperma.
Mejor que las opciones hormonales para mujeres
Por el contrario, «la tasa de eficacia de NES/Tgel es igual o incluso mejor que las opciones hormonales anticonceptivas para las mujeres», declaró Blithe. En el estudio participaron 222 hombres que completaron al menos 3 semanas de tratamiento diario con el gel anticonceptivo. El gel contenía 8 miligramos (mg) de acetato de segesterona (nestorona) y 74 mg de testosterona. Los hombres se aplicaron el gel una vez al día en cada omóplato. El umbral considerado eficaz para la anticoncepción era de un millón o menos de espermatozoides por mililitro de semen, señaló Blithe.
La mayoría de los participantes en el estudio (86%) alcanzaron este recuento de espermatozoides en la semana 15. Entre esos hombres, la producción de esperma se suprimió en una mediana de menos de 8 semanas de tratamiento con noresterona-testosterona. «Un tiempo más rápido hasta la supresión puede aumentar el atractivo y la aceptabilidad de este fármaco para los usuarios potenciales», apunta la investigadora.
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El tratamiento con testosterona por sí solo disminuye la producción de esperma, con una mediana de tiempo de 15 semanas, pero la adición de acetato de segesterona acelera el tiempo y reduce la dosis de testosterona necesaria para suprimir la producción de esperma con respecto a la testosterona sola. Además, en el régimen diario de gel de segesterona-testosterona, los niveles sanguíneos de testosterona se mantienen en el rango fisiológico para mantener la función sexual normal y otras actividades dependientes de los andrógenos.
«Creo que ha habido mucha mala publicidad sobre los métodos hormonales para hombres que hacen que las expectativas de la gente sean bastante aterradoras, pero eso tal vez nos reporte beneficio porque la gente se inscribe en nuestro ensayo y se da cuenta de que no pasó nada malo. Eso es genial», confirmó Blithe, satisfecha con los limitados efectos secundarios observados. El estudio sigue probando la eficacia, seguridad, aceptabilidad y reversibilidad del anticonceptivo tras la interrupción del tratamiento. El próximo año esperan comenzar la fase 3 del ensayo clínico.
