El toro de Osborne también se puede ver en estos países

El toro de Osborne también se puede ver en estos países

“Mamá, papá, mira un toro gigante”. Durante años, miles de niños han pronunciado esa frase cuando iban de viaje por alguna carretera de la geografía española. Esa memoria colectiva de generaciones, aún sigue vigente en España y en otros países del mundo.

Tal y como cuenta la Fundación Manolo Prieto, en 1956, las Bodegas Osborne encargó a la Agencia de Publicidad AZOR un anuncio para promocionar su coñac “Veterano”, una valla publicitaria que se repartirá a lo largo de la geografía española. En esa época, Manolo Prieto es el Director Artístico de la Agencia publicitaria, y el encargo recae sobre él. Ahí nace la famosa silueta del Toro, un Toro desafiante, mirando de frente, atento a lo que sucede en el horizonte.

Desde esa fecha, el Toro de Osborne ha pasado por múltiples vicisitudes. Desde la adaptación de la silueta, que no gustó precisamente a su diseñador, a la retirada de el eslogan publicitario que lo acompañaba en 1988, transformándolo en un simple toro negro y enorme.

En el año 1994 el Ministerio de Transportes y Obras Públicas, el entonces Ministro Josep Borrell, resolvió que los 97 toros debían desaparecer del paisaje español junto con el resto de vallas publicitarias situadas en los márgenes de las carreteras españolas para hacer cumplir la Ley de Carreteras. La contestación social desde todos los ámbitos, algo que se no se practica hoy día en muchos asuntos, hizo recular a los gobernantes, por lo que el Parlamento acabó indultando -con una amplia mayoría social detrás- a a la valla publicitaria.

En Andalucía incluso se fue más allá y en 1996 se inscribió a la valla publicitaria en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz y en febrero de 1997 los 21 toros que descansan en tierras andaluzas pasan a convertirse oficialmente en Monumento Histórico Andaluz, garantizando así su supervivencia futura.

El respaldo político y social se reforzó con el apoyo jurídico, porque en 1998 el Tribunal Supremo indultó definitivamente la silueta del toro en las carreteras ya que entendió que “ha dejado de ser el emblema de una marca, para convertirse en algo decorativo, integrado en el paisaje”.

Actualmente quedan 91 toros en el territorio nacional, pero existen algunos más por el mundo. La compañía recuerda que en Japón recientemente se ha instalado una valla de El Toro de Osborne, e igualmente otras vallas decoran el paisaje de países como Dinamarca y México.

Hay indultos que no han generado polémica y que son aceptados por la gran mayoría social del país, sirviendo verdaderamente para unir y reforzar los lazos de pertenencia. El toro de Osborne es uno de ellos.