El whatsapp de Courtois con el que empezó su resurrección

El whatsapp de Courtois con el que empezó su resurrección

Cuando justo antes de comenzar la temporada Courtois gritó como nunca en un entrenamiento no imaginaba que su sensación de que se acababa de romper la rodilla, que expresó en un mensaje a sus colaboradores, iba a transformarse unos meses después en una fiesta por todo lo alto en Cibeles y el Bernabéu el domingo después de la final de la Champions. El belga ha llegado a tiempo para gritar y cantar con sus compañeros ante el madridismo, y no sólo está listo Thibaut para la fiesta, también lo estuvo para ser importante el día más importante.

 

Ancelotti lo tuvo claro desde el principio: tenía que elegir entre un portero que había estado enorme y había sido clave para llegar a Wembley o el mejor del mundo en su puesto antes de lesionarse las dos rodillas. Y Courtois demostró que estaba no preparado, preparadísimo. Jugó cuatro partidos de Liga sin encajar un gol y con varios paradones al Cádiz y al Alavés, de esos en los que se hace grande y el delantero no ve portería. Lo que le pasó a Adeyemi en la primera parte de la final o a Füllkrug con su cabezazo en el segundo tiempo. Cuando el Madrid no se encuentra bien, se siente seguro por tener a su espalda a una torre que es el último salvavidas y no suele fallar. Tampoco encajó gol en la gran final y aunque no repitió la actuación heroica de París de 2022, sí que estuvo ahí para sacar las manos y llegar con 0-0 al descanso.

“Ha sido un año muy difícil, con mucho apoyo del vestuario, de los compañeros, del cuerpo técnico, médico, y de los aficionados. Muy feliz y contento, hemos podido cerrar la temporada de esta forma. Cinco veces la portería a cero, no me quejo de terminar así”, decía Thibaut, que dijo que volvería a ser el mismo tras el grave percance y parece que así es. Yo estaba tranquilo. El míster sabe lo que tiene conmigo. Lunin ha jugado a un gran nivel y hay que darle lar gracias, pero yo estaba bien en los partidos que jugué e hice entrenamientos a un nivel alto. Es lo que ha visto el míster. Tendrás que preguntarle a él si no estuviese enfermo Lunin qué hubiera pasado, pero él confiaba en mí y estoy feliz de devolverle la confianza”, explicaba tras la final sobre ese debate interno que Ancelotti tuvo y en el que se decantó por Courtois.