Foment reclama que las centrales nucleares catalanas estén operativas diez años más

Foment reclama que las centrales nucleares catalanas estén operativas diez años más

Que las centrales nucleares catalanas estén operativas diez años más. Esa es la última reclamación lanzada Foment del Treball, que hace esta petición como garantía de suministro de energía eléctrica en Cataluña. La patronal catalana quiere así expresar su preocupación por la política energética y por el retraso en la transición a fuentes renovables, recordando que Cataluña está por debajo la media europea y española en la implantación de energía renovable. El presidente de de la entidad, Josep Sánchez Llibre, ha manifestado por tanto su preocupación, lamentando que “Cataluña está en una situación energética tan crítica que no le permitirá cumplir con los objetivos europeos”.

Aunque Foment ha reafirmado su compromiso por el logro de la neutralidad climática en el 2050, ha presentado una batería de 13 medidas de política energética que planteará al próximo gobierno catalán que surja de los comicios del pasado 12 de mayo. Pese a que sabe que no tiene competencias para decidir sobre la fecha de cierre de las centrales catalanas, a través de un comunicado ha expuesto un paquete de medidas que considera que el Govern debería hacer suyas de cara a la próxima legislatura, ya sea “en el marco de sus competencias o bien reclamándolas al Estado”.

Entre las peticiones principales -además de la ampliación de la operativa de las centrales nucleares- destacan garantizar la seguridad de suministro a la industria y a los sectores; definir una transición energética industrial; garantizar la neutralidad tecnológica; potenciar el desarrollo e implantación de los gases renovables como una prioridad a
corto plazo en la descarbonización; desarrollar con celeridad la estrategia catalana del biogás; impulsar plantas de biometano por su inyección en la red; acelerar el desarrollo del hidrógeno renovable; reforzar el sistema energético con la cogeneración de alta eficiencia y los ciclos; apostar por potenciar el almacenamiento energético combinados; Promover las redes de interconexión energética con Francia y con otras comunidades autónomas; o reforzar el sistema energético con la cogeneración de alta eficiencia

“Sólo un 15% de la energía generada en Cataluña procedió de fuentes renovables, frente al 50% del Estado”, argumentó Foment, que mostró su “preocupación” por la política energética que se aplica en Cataluña y por el “retraso” en la transición energética hacia fuentes renovables. Sánchez Llibre denunció que el Govern se comprometió a tramitar 3.000 MW de proyectos renovables en este mandato y apenas ha alcanzado 1.692 MW, “poco más del 50%”. Por eso se muestran “conscientes y preocupados porque la actual política energética de Cataluña no apuesta por grandes parques fotovoltaicos o eólicos ni por la interconexión de redes, y tampoco quiere ampliar la operación a largo plazo de las centrales nucleares y pretende, al mismo tiempo, descarbonizar el sector petroquímico y la gran industria”. Por ello estima Foment que que es “obligado plantearse con qué tipo que energía haría falta trabajar”.

Las compañías energéticas propietarias de centrales nucleares catalanas -Endesa, en el caso de Ascó I y II, y Endesa e Iberdrola, en lo que respecta a Vandellòs II- firmaron en marzo de 2019 un protocolo para el cierre del parque nuclear español, con un calendario por el que irían cesando en su actividad entre 2027 y 2035. Foment reclama la extensión de la operativa de las nucleares en toda España, pero sobre todo en Cataluña, porque en esta región “la energía producida con nucleares representó el 58% de toda la energía consumida en 2023”.