Igualdad admite descoordinación en la lucha contra la violencia de género

Igualdad admite descoordinación en la lucha contra la violencia de género

El Ministerio de Igualdad reunió esta tarde al Comité de crisis para analizar los últimos crímenes machistas que dejaron seis víctimas en 24 horas este fin de semana, con los asesinatos de cuatro mujeres y dos menores de edad. Aunque es cierto que la titular de Igualdad, Ana Redondo, ya tenía agendada esta reunión desde finales de abril, cuando tuvieron lugar siete crímenes machistas quisieron hacer hincapié en la importancia de este encuentro después de los feminicidios del fin de semana, con la finalidad de analizar qué ha podido fallar en cada uno de estos crímenes.

«El sistema VioGén funciona», aseveró nada más comenzar su intervención ante los medios la ministra Redondo, aunque reconoció que comprende la «frustración e impotencia» que puede generar en la sociedad que ocurran «casos tan terribles» como los de este fin de semana. Aun así, reconoció que el modelo no es perfecto y que hay que «reforzar» algunos aspectos. «Debemos ser más ágiles en la respuestas y más efectivos en la protección de las mujeres, porque hay elementos que se pueden mejorar y es en lo que tenemos que trabajar», confesó.

Durante su intervención, también reconoció que, pese a todos los esfuerzos, «la violencia de género no es sencilla de erradicar, llevamos muchos años luchando» y desde hace 20 se trata como un «problema de estado, trabajamos contra reloj para frenarlo, pero es algo cultural que está en nuestra sociedad» y, además, «hay discursos negacionistas que no ayudan». Es más, apuntó que estas corrientes «han provocado un repunte en la violencia de género» porque los machistas «lo ven como un aliento y esto tiene efectos perversos»

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska se sumó también a la afirmación de la ministra Redondo a la hora de apuntar a la necesidad de la denuncia por parte de los familiares o personas del entorno de la víctima.

«La falta de denuncia es un problema, no podemos exigirles a las mujeres que la lleven a cabo, pero sí a su entorno y a la sociedad. Existe una infradenuncia muy importante», recalcó la titular de Igualdad. «La denuncia es la llave que abre el paraguas de protección a las víctimas de violencia de género. Está claro que el modelo no es infalible pero salva muchas vidas», añadió Marlaska.

Protección a los menores

Desde Igualdad también subrayaron la necesidad de una «mayor coordinación entre todos los elementos que forman parte de la red de protección de las víctimas». Redondo aclaró que trabajan codo con codo con varios ministerios como con el de Sanidad, «porque es ahí donde muchas veces está la puerta de entrada de las víctimas de esta violencia. Es necesario estrechar esa colaboración y así poder detectar con antelación los casos que ahora se pierden en el sistema».

Sobre la violencia vicaria, un tema de especial sensibilidad y que ha dejado 62 asesinados desde 2013, la ministra aseveró que «necesita medidas específicas para proteger a los menores dentro de este tipo de violencia. Las medidas no solo deben ser civiles sino también penales porque las primeras no protegen de forma suficiente a los menores». También insistió en que «hay que escucharlos y replantearnos la idea de interés superior del menor que está en atender su necesidad escucharle y saber cómo sufre la situación y la no necesidad de mantener el vínculo con el progenitor que se sabe que es un maltratador».

Al comité de crisis de Igualdad acudieron representantes de las comunidades autónomas en las que tuvieron lugar los asesinatos, de los Ministerios de Igualdad, Interior y Justicia, así como de la Fiscalía, y del Consejo General del Poder Judicial, además de la responsable de VioGén, Belén Crego.

Mientras tanto, continuaron ayer los homenajes a las cuatro mujeres asesinadas este fin de semana en varias localidades. En Granada, provincia en la que el sábado una joven de 20 años y su madre murieron a manos de la expareja de la primera, se celebró un minuto de silencio al que se sumaron responsables de la Junta de Andalucía. El delegado del Gobierno andaluz en Granada, Antonio Granados, que encabezó la concentración, recordó que en este caso no existían denuncias previas.