La Comunidad de Madrid ha anunciado que iniciará el proceso para declarar la Feria del Libro de Madrid como Bien de Interés Cultural del Patrimonio Inmaterial. Este anuncio coincide con la inauguración de la 83ª edición de esta tradicional cita literaria, que tendrá lugar en el Parque de El Retiro hasta el 16 de junio.
Mariano de Paco Serrano, consejero de Cultura, Turismo y Deporte, ha destacado la importancia de este evento, que se celebra anualmente desde 1933. «Es un encuentro de autores y lectores, una tradición que ha perdurado a lo largo del tiempo, justificando plenamente su protección como Bien de Interés Cultural inmaterial», afirmó.
Bajo el lema «Entrena tu mente, lee tu cuerpo», la Feria de este año une deporte y literatura en un amplio programa de actividades. El pabellón de la Comunidad de Madrid será un punto neurálgico con eventos para todas las edades. Desde experiencias familiares como «Caballero soy», donde Miguel de Cervantes narrará en primera persona su vida, hasta la presentación del festival de novela policiaca Getafe Negro y la celebración del legado de las escritoras María Goyri y María Teresa León.
El Gobierno regional, principal patrocinador del evento, ha destinado 110.000 euros para su organización y otros 200.000 para ayudar a los libreros con los costos de puestos y transporte. Contará con 358 casetas y casi 1.000 sellos editoriales.
El pabellón de la Comunidad de Madrid ofrecerá también el tercer encuentro del Club Virtual de Lectura Sui Generis de la Red de Bibliotecas regional, mesas redondas con autores como Javier Ruescas, y espectáculos como «Historias Olímpicas» para los más pequeños. Además, se presentará «Technovation Girls», un programa para fomentar el emprendimiento tecnológico entre chicas de 8 a 18 años.
Organizada por la Asociación de Empresarios del Comercio del Libro de Madrid y la Federación de Asociaciones Nacionales de Distribuidores de Ediciones (FANDE), la Feria del Libro de Madrid sigue consolidándose como un evento cultural imprescindible, ahora en vías de ser reconocido oficialmente como parte del patrimonio cultural inmaterial de la región.
