La especia secreta que evita la inflamación de las articulaciones y calma los dolores de rodilla

La especia secreta que evita la inflamación de las articulaciones y calma los dolores de rodilla

Un plato de comida no se toma solo por las propiedades nutricionales que contiene, es mucho más que la mera suma de átomos que dan lugar a proteínas, aminoácidos, azúcares y oligoelementos. La comida es un pilar básico de la cultura, y da muestras de los diferentes rasgos de las civilizaciones.

Desde los primeros tiempos del hombre se utilizaron condimentos y especias, no solo para hacer más sabrosos los platos, también para esconder malos sabores o para agregarle más hierbas que aportan ciertas vitaminas y aceites esenciales que de otra manera no se pueden obtener en la dieta.

Las hierbas y especias se llevan utilizando en la preparación de remedios caseros durante siglos. Sin embargo, estos conocimientos que han pasado de generación a generación se están perdiendo en los últimos años.

Una especia común con propiedades poco conocidas

Es uno de los condimentos de origen vegetal más populares tanto en España como en la dieta mediterránea en general, y su uso está tan extendido por el sabor fuerte, amorgo y con trazas picantes que deja en el paladar.

Su nombre significa “alegría de la montaña”, y se extrae de la planta “Origanum vulgare”, originaria del oeste y el suroeste de Eurasia y las tierras que rodean al Mar Mediterráneo. Además de como condimento, se ha usado en multitud de infusiones herbales por diferentes culturas a la largo de la historia.

Comúnmente se la conoce como orégano, y de la planta se utiliza para fabricar este famoso condimento tan solo las hojas, que se dejan secar para potenciar al máximo su sabor y profundidad.

Crece en todo tipo de terrenos, y es una planta bastante común en la Península Ibérica. Estamos más que acostumbrados a ver este vegetal para verlo por el campo, aunque no siempre seamos capaces de reconocerlo por su aspecto.

La planta tiene una altura media de unos 45 centímetros, con tallos de tonalidad rojiza acabados en múltiples ramas con muchas flores de color blanco, rosa y rojizo. Las hojas, la parte más utilizada para usos culinarios, crecen de manera opuestas del tallo, son de forma ovalada y ancha, de entre dos y cuatro centímetros.

Valores medicinales y usos curativos del orégano

Químicamente, las hojas del orégano son muy útiles porque contienen retinol (vitamina A), tiamina (vitamina B1), Riboflavina (vitamina B2), Niacina (vitamina B3), vitamina B6, vitamina C, vitamina E, vitamina K, además de oligoelementos y compuestos esenciales para un mejor funcionamiento del organismo, como calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio y zinc.

Ha sido utilizado desde la antigüedad por sus propiedades antiinflamatorias, ya que aplicada como aceite esencial sobre las articulaciones ayuda a rebajar posibles hinchazones en las junturas.

Recientemente, según informa EuropaPress, un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad de Bonn (Alemania) y de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (Suiza), reveló que el principio químico que le confiere al orégano la capacidad de disminuir los dolores e inflamaciones articulares es la betacariofilina.

Además, tiene usos antimicrobianos, antisépticos y digestivos, por lo que se ha utilizado en la preparación de multitud de infusiones para tratar las inflamaciones de garganta y la tos recurrente.

Aparte de calmar la irritación de garganta, se ha usado de igual forma como remedio auxiliar en trastornos del sistema gastrointestinal porque ayuda a la digestión, calma ardores de estómago y favorece una mejor regulación del tránsito.

Por último, también se ha demostrado que el orégano puede ser de utilidad en tanto que ayuda a cerrar o cicatrizar mejor las heridas que de produzcan en cualquier parte del cuerpo.