La inteligencia artificial “made in Spain” que detecta enfermedades cardiovasculares en 10 minutos

La inteligencia artificial “made in Spain” que detecta enfermedades cardiovasculares en 10 minutos

Una prueba diagnóstica cardiovascular, basada en inteligencia artificial (IA) y desarrollada por la empresa española Apolo AI, permite acelerar el diagnóstico de las enfermedades del corazón (10 minutos frente a una semana de pruebas estandar, que es lo que se necesitas de media) al tiempo que reduce de forma significativa los costes sanitarios (en 1.200 euros por paciente).

Se trata de Cardia by Apolo, la primera tecnología mundial que genera, por medio de IA, la reconstrucción 3D del corazón de forma automática a partir de información 2D extraída de un ecocardiograma estándar. Se consigue así una representación fiel de la estructura de este órgano con una segmentación de ventrículos, aurículas y miocardio. Gracias a este modelo se puede realizar un análisis de volúmenes y áreas y también análisis tipo como el Strain (que mide los parámetros de deformación miocárdica) y el de Doppler (para verificar enfermedades vasculares).

Esto permitirá la detección y el análisis de las miocardiopatías, las anomalías funcionales y las alteraciones valvulares.

“Cardia reproduce la estructura y la función del corazón del paciente, y, además, añade eficiencia al diagnóstico realizando análisis del modelo 3D de manera automática. Es una herramienta de gran utilidad que optimizará recursos y permitirá acortar las listas de espera”, indica el CEO de Apolo AI, Ignacio Lucea.

El proyecto, del que acaba de presentarse el primer prototipo, se encuentra en fase de desarrollo y de validación médica. Se está esperando la certificación con el marcado CE y se prevé que se podrá comercializar en 2025.”Cardia nos permite contribuir a la detección de posibles problemas con mayor velocidad, facilitando el cribado de pacientes y derivando a los especialistas a aquellos con patologías cardiovasculares concretas”, añade Lucea.

Las enfermedades cardiovasculares (ECV) provocan 19 millones de muertes en el mundo. Uno de cada tres españoles sufrirá una a lo largo de su vida. Un artículo publicado en Revista Española de Cardiología indica que se producen en España más de 125.000 muertes y más de cinco millones de estancias hospitalarias por ECV al año. En más del 60% de los casos no se controlan adecuadamente estos factores de riesgo.

“El objetivo principal de CARDIA es convertirse en una aliada para los cardiólogos ya que este modelo realiza un prediagnóstico de potenciales problemas cardiovasculares que les ayuda a ahorrar tiempo de análisis para poder invertirlo en la atención a los pacientes”, señala.

Según la Sociedad Española de Cardiología (SEC), en España hay seis cardiólogos por cada 100.000 habitantes, lo que pone de manifiesto la escasez de médicos especialistas. Además, falta infraestructura en zonas urbanas y en zonas no hospitalarias. Estos factores provocan largas listas de espera, que retrasan el inicio del tratamiento en caso de ser diagnosticado con una ECV. El tiempo medio de un diagnóstico completo es de tres meses en hospitales privados.