Insumisas y musas. Mujeres y empoderadas. Trabajadoras y revolucionarias. Así fueron la directora de cine Carole Roussopoulos, la actriz Delphine Seyrig y la traductora Ioana Wieder. Tres figuras que en los años 70 y 80 cultivaron su propia lucha en pro de la igualdad, a través del colectivo que fundaron bajo el nombre de Les Insoumuses. Fundado en 1975, su objetivo fue el de crear una serie de vídeos que se centraran en cómo se le ponía el foco a las mujeres en los medios de comunicación de la época, o bien abordaban la discriminación laboral de las féminas y también en términos reproductivos. Fue un movimiento revolucionario, tanto a nivel de progreso social como tecnológico, y ello se reivindica ahora a través de una exposición ofrecida por la Filmoteca de Cataluña.
Entre el 11 de julio y el 17 de noviembre, el espacio catalán ofrece “Precursoras: feminismos, cámara en mano y archivo en el hombro”, una muestra que recorre la historia cultural y visual del feminismo francés en las décadas citadas, a través de la obra e influencia de Seyrig, Roussopoulos y Wieder. Presentada en París de septiembre a diciembre de 2023 en la Cité internationale des arts, esta exhibición ha sido adaptada ahora por la Filmoteca de Cataluña. Los vídeos de Les Insoumuses, junto con los otros cineastas y colectivos afines, ofrecen una cartografía de las luchas del momento: del derecho al aborto y la libertad sexual a la guerra del Vietnam o la antipsiquiatría, en un marco decididamente internacional, y propone un diálogo entre generaciones de videastas y artistas feministas que rebasa la escena francesa.
Una historia en curso
Comisariada por Nicole Fernández Ferrer y Nataša Petrešin-Bachelez, incorpora a algunas artistas catalanas como Eugènia Balcells, Pilar Aymerich, Fina Miralles o Mari Chordà, con la voluntad de continuar escribiendo esta historia, que hoy se prolonga gracias a la intervención de nuevas generaciones de artistas. Algunas de ellas, como Maria Klonaris y Katerina Thomadaki, Bouchra Khalili, Zanele Muholi, Rada Akbar, Paula Valero Comín o las integrantes del colectivo Chimurenga, han sido residentes en la Cité internationale des arts de París, y algunas de sus piezas forman parte de las colecciones del Centro audiovisual Simone de Beauvoir en la capital gala, como por ejemplo obras de Lur Olaizola o Sarah Maldoror.
La muestra está dividida en varios ámbitos temáticos: “Una historia en curso”, “Apropiación feminista de los medios de comunicación”, “Luchas transnacionales”, “Contrarrestar la normatividad” y “Prácticas insumisas”. En un momento en que la condición de las mujeres y las personas queer empeora en muchas partes del mundo, la exposición quiere poner en valor el diálogo que se establece entre los trabajos contemporáneos y las obras históricas, imágenes hechas con las primeras cámaras y magnetoscopios portátiles que manifiestan la lucha de estos colectivos por su emancipación y libertad.
