Por más de tres meses, la cuesta de la gasolina y el diésel ha cambiado de pendiente, ofreciendo un respiro a los bolsillos de quienes dependen del volante en su día a día. No obstante, este abaratamiento parece haber empezado a moderarse en plena escalada bélica en Oriente Próximo. Según el Boletín Petrolero de la UE correspondientes del 1 al 7 de octubre, la gasolina encadenó su decimotercera caída consecutiva, mientras que el gasóleo se mantuvo estable respecto a la semana anterior, para mantenerse en ambos casos en niveles mínimos desde principios de 2022.
En concreto, el precio medio del litro de gasolina se situó en 1,481 euros, al bajar un 0,067% con respecto a los 1,482 euros de la semana anterior. Por su parte, el diésel se situó en 1,362 euros, manteniéndose en el mismo nivel de la semana pasada, después de encadenar once semanas de descensos de descensos consecutivos. Tras la evolución de precios de esta última semana, la gasolina acumula un descenso del 8,9% y el diésel una bajada del 9,2% desde que iniciaron en julio de este año una espiral de descensos, en plena temporada de vacaciones. A su vez, si se comparan ambos con los precios de hace un año, son un 15,29% más baratos en el caso de la gasolina y un 19,21% más económicos en el caso del diésel.
Con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros de gasolina tiene un coste de unos 81,45 euros, unos 14,9 euros menos que en las mismas fechas del año pasado, cuando ascendía a unos 96,36 euros. Para los vehículos de diésel, llenar un depósito supone un desembolso de 74,91 euros, en torno a 17,87 euros menos que en la misma semana de octubre de 2023, momento en el que el precio era de 92,78 euros.
Además, el precio medio del litro del diésel se mantiene por debajo de los niveles en que estaba antes del estallido de la invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de 2022, cuando era de 1,479 euros el litro. La gasolina, también se mantiene por debajo, ya que tenía un precio de 1,591 euros el litro en ese momento. Igualmente, ambos carburantes continúan lejos de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
Asimismo, el diésel sumó 84 semanas por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual anterior a la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 hasta mediados de febrero de 2023, cuando se rompió la dinámica.
Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la Unión Europea, situada en 1,623 euros el litro, y de la eurozona, con un precio medio de 1,676 euros. En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,512 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,539 euros.
