Una vez derrotados los mosquitos, en el paraíso de diseño danés donde pasa los días Alemania en Herzogenaurach, flota la preocupación por otro picotazo. Enfrente van a tener a la selección más arrojada de la historia de las Eurocopas. Ningún equipo se ha lanzado nunca a defender tan lejos de su portería como España. Las acciones defensivas de la selección se localizan, de media, a 53,4 metros de su portero, según los registros de StatsBomb, ocho metros más arriba que en el último gran torneo de selecciones, el Mundial de Qatar.