Préstamos para pensionistas: qué son, cómo solicitarlos y requisitos

Préstamos para pensionistas: qué son, cómo solicitarlos y requisitos

Los préstamos son los productos que permiten a una persona financiar la adquisición de bienes duraderos, como un coche o un electrodoméstico, hacer un viaje o pagar una carrera, entre otros. Y es que el banco entrega una cantidad de dinero de una vez y, a través de cuotas periódicas –ya sean mensuales, trimestrales o semestrales–, el prestatario irá devolviendo todo el dinero que le ha sido prestado más los intereses que se deben pagar a la entidad financiera.

Todos en algún momento de nuestras vidas hemos tenido o tendremos que recurrir a uno de estos productos . Pero, ¿qué ocurre cuando los pensionistas necesitan pedir n préstamo para hacer frente a las necesidades que le puedan surgir? Este producto bancario es igual que uno cualquiera, aunque la diferencia es que quién lo recibe es un pensionista, que no solo incluye a las personas jubiladas, sino también a aquellas que reciben una pensión de incapacidad, gran invalidez, viudedad u orfandad, entre otras. Esos préstamos pueden ser de todo tipo, desde hipotecarios a personales o préstamos rápidos.

“El pensionista que quiera solicitar un préstamo ha de cumplir los requisitos generales que establecen los bancos para conceder financiación, pero además ha de saber que las entidades valorarán, en su caso en particular, otras cuestiones, como su edad y su estado de salud”, explican desde el blog del Banco Santander.

A la hora de conceder un préstamo, las entidades bancarias revisan la solvencia económica del solicitante, aunque en el caso de los préstamos para jubilados, también se tendrán en cuenta su edad y su condición de salud. “Lo habitual es que los bancos no concedan préstamos a mayores de 75 años, aunque puede haber excepciones”, asegura la entidad financiera.

En estos casos, la aprobación del préstamo requirirá mayores garantías como aportar un avalista o contratar un seguro de vida. Los bancos pedirán al solicitante lo siguiente:

Ser mayor de edad.Tener DNI o NIE en vigor.Acreditar una fuente de ingresos periódica, es decir, el cobro de la pensión correspondiente.Aportar la última declaración de la Renta.Justificar que no se tienen deudas pendientes y no se está en la lista de morosos.Una cuenta bancaria, en la que se ingresará el préstamo.

¿Cómo solicitar un préstamo para pensionistas y jubilados?

Tras decidir el dinero que necesita el prestatario, se solicitará cita en el banco y se preparará la documentación que va a pedir la entidad financiera para estudiar el caso.

Asimismo, en algunos casos, en función los años y el estado de salud de lo prestatarios, la entidad financiera podrá solicitar alguna garantía extra, como añadir una segunda persona como prestatario, contar con un avalista o contratar un seguro de vida.

“Si además de la pensión, tienes otros ingresos o eres titular de algún bien, es conveniente que informes de ello al banco, pues mejorará tu solvencia económica y facilitará la concesión del crédito”, sentencian.