Cuando nos vamos de vacaciones, y sobre todo durante varios días, es importante tener en cuenta el alojamiento en el que pasaremos las diferentes jornadas. Es por ello que es vital ver las diferentes ofertas de los diferentes apartamentos, albergues u hoteles que estén en la ciudad o pueblo al que vayamos.
Ya dependiendo del bolsillo del interesado, podrá optar a alojarse en un repertorio de hoteles que irán desde los más humildes hostales hasta los de cinco estrellas, que suelen contar con todo tipo de ventajas. Una de estas suele ser que pueden traerte la comida a la habitación, tengan servicio de piscina exterior o tengan buffet libre en su cafetería.
Este último suele ser uno de los grandes reclamos de los huéspedes, así como uno de las principales excusas para saltarse una dieta alimentaria. Puede existir una oferta de alimentos y platos muy variada, desde las comidas más tradicionales hasta las más exóticas.
Asimismo, y si la calidad es buena, podemos sentirnos tentados a llevarnos comida para degustarla más tarde. Pero, ¿es posible y legal realizar esta acción?
Normas
Para comprobarlo, es necesario comprobar las políticas de cada cadena de hoteles y cada establecimiento, aunque lo más normal es que no esté permitido llevarse comida fuera del buffet. Los motivos pueden ser variados, como los sanitarios o de control de calidad, aunque también está la explicación que asegura que los alimentos del buffet están hechos para ser consumidos en un ambiente controlado y frescos, sin riesgos de contaminación ni problemas de conservación.
En caso de incumplirlas, el huésped puede arriesgarse, en casos severos y dependiendo del local, a una violación de las políticas del establecimiento, con posibilidad de cargos adicionales y, en casos muy graves, a la expulsión de este del hotel.
Asimismo, de la misma manera que hay hoteles que sancionen estas prácticas, hay otros que ofrecen alternativas, como la solicitud de un picnic, que es un menú preestablecido empaquetado adecuadamente para su transporte y conservación.
De todas maneras, es importante informarse correctamente de las normativas de las diferentes cadenas de hoteles y establecimiento y, ante cualquier duda, preguntarla en la recepción o en atención al cliente, así como comprobar si existen alternativas viables como el mencionado picnic.
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