¿Qué tipo de antidepresivos engordan menos?

¿Qué tipo de antidepresivos engordan menos?

España es el tercer país de la Unión Europea con más consumo de antidepresivos. Cerca del 10% de la población los toma, una cifra nada desdeñable y que va en aumento año tras año. El aumento de peso es un efecto adverso de este grupo de fármacos, pero no hay una razón clara que pueda explicar por qué afecta a unas personas y a otras no. Además, no todos los subtipos influyen en el peso de la misma manera.

Ahora, investigadores de la Facultad de Medicina de Harvard han despejado algunas incógnitas en este sentido. Para hacerlo, estudiaron los registros electrónicos de salud de más de 183.000 adultos de entre 18 y 80 años que iniciaron el tratamiento con uno de los ocho antidepresivos de primera línea con el objetivo de evaluar los cambios en el peso por medicación a los 6, 12 y 24 meses después de que los participantes comenzaran a tomarla. Los medicamentos estudiados fueron los más comunmente recetados: sertralina, citalopram, bupropión, escitalopram, fluoxetina, venlafaxina, paroxetina y duloxetina.

La investigación, publicada en Annals of Internal Medicine determinó que los usuarios de bupropión tienen entre un 15% y un 20% menos de probabilidades de ganar una cantidad de peso clínicamente significativa que los usuarios de sertralina -un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS) que es el que más se receta en el mundo-.

Los resultados también mostraron que un gran porcentaje de pacientes tomaban un medicamento que conducía a un mayor aumento de peso que las alternativas comúnmente disponibles en la misma clase o subclase. “Aunque existen varias razones por las que los pacientes y sus médicos pueden elegir un antidepresivo en lugar de otro, el aumento de peso es un efecto secundario importante que a menudo lleva a los pacientes a dejar de tomar su medicación”, enfatiza el autor principal Jason Block, médico de medicina interna general y profesor asociado de medicina poblacional de la Facultad de Medicina de Harvard en el Instituto de Atención Médica Pilgrim, según recoge Ep.

La variedad de opciones con las que cuentan especialistas y pacientes a la hora de elegir un tratamiento antidepresivo permiten que se tenga en cuenta esta variable, dado que la obesidad es un factor de riesgo para otras muchas enfermedades. Por ello, los científicos sugieren que “se utilice esta información, entre otros factores, para ayudar a decidir cuál es la opción correcta para ellos”.

Según publica la catedrática de Fisiología Humana en la Universidad de Navarra, Amelia Martí, en el portal SMC, “estos resultados están en línea con un trabajo previo de nuestro grupo publicado en 2019 en el que realizamos una revisión sistemática dirigida a evaluar la posible asociación del tratamiento antidepresivo y antipsicótico con el aumento de peso corporal en estudios de cohortes. Se incluyeron 27 estudios de cohortes elegibles independientes con sujetos niños (2-18 años) y adultos (18-103 años). La mayoría de los estudios incluidos mostraron un aumento de peso del 5 % en individuos que utilizaban terapia antidepresiva. Sin embargo, la quetiapina, el haloperidol, la trifluoperazina, la risperidona, el aripiprazol, la olanzapina y la clozapina -todos ellos antipsicóticos- aumentaron el peso corporal por encima del 7 % con respecto al valor inicial, lo que se considera un resultado clínicamente significativo. Curiosamente, se encontró pérdida de peso en los individuos tratados con bupropión”