Más de 100 profesionales y 1.000 coleccionistas se dieron cita en el primer Evento Numismático Internacional “Madrid 2024”, acontecido entre los días 26 y 29 de junio. Este evento incluyó una convención numismática, actos institucionales, charlas y una subasta donde se batió el récord de la moneda de 8 escudos más cara jamás vendida.
Nueva York, Berlín, Tokio, Londres… son algunas de las sedes de los eventos más importantes para los aficionados y profesionales de la numismática, esto es, del estudio y el coleccionismo de monedas. Ninguno de estos eventos internacionales ocurría en nuestro país a pesar de que la moneda española es una de las más coleccionadas y codiciadas en todo el mundo debido a la enorme trascendencia histórica del oro y la plata de la América Virreinal. Los comerciantes extranjeros tenían un gran interés en conocer el mercado español; y los coleccionistas españoles compartían ese mismo interés en conocer el mercado internacional. Esta conveniencia mutua ha sido sobradamente satisfecha en el Evento Numismático Internacional “Madrid 2024”, organizado por Jesús Vico, Daniel Frank Sedwick y Luis Domingo y en cuya organización colaboran el Blog Numismático, Coins Weekly y la Real Casa de la Moneda – Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (RCM-FNMT).
El evento comenzó con una doble subasta los días 26 y 27 de junio por parte de la firma madrileña Jesús Vico & Fernando Segarra. La subasta del 26 de junio incluía monedas de extrema rareza muy buscadas por los coleccionistas más exigentes. Entre ellos se encontraba un cuatro escudos único acuñado en Segovia en 1651 (114.000 euros de venta) y un doble ducado valenciano de los Reyes Católicos (114.000 euros de venta) y un rarísimo 8 reales acuñado en México en 1732, único e inédito hasta esta subasta (126.000 euros) de la Colección Segarra.
El día 27 tuvo lugar el momento histórico para la numismática española con la subasta de la colección Segarra de 8 escudos. Los 8 escudos, son las monedas de oro más grandes acuñadas por el Imperio Español. Estas monedas pesan 27 gramos y fueron divisa internacional entre los siglos XVII y XIX. Si entonces las codificaban los comerciantes, los emperadores o los piratas, hoy en día son los coleccionistas quienes las buscan con ahínco. Más todavía si tienen una calidad tan extraordinaria como todos los ejemplares ofrecidos en esta colección, perteneciente a Fernando Segarra, uno de los más importantes comerciantes y coleccionistas numismáticos de la historia de España. La subasta atrajo tanta atención del público que, partiendo de un precio de salida global de 700.000 euros, disparó la venta a 2.300.000 euros, en apenas 73 piezas.
Los 800 lotes rematados ambos días alcanzaron un total de 5.500.000 euros.
La moneda que más atención atrajo fue el 8 escudos galano acuñado en México en 1715. Los 8 escudos galanos son de extrema belleza y rareza ya que eran acuñaciones especialmente cuidadas forjadas solo bajo encargo explícito a la casa de la moneda de México a principios del siglo XVIII. El ejemplar ofrecido en la Colección Segarra, además, tiene otros atractivos para los coleccionistas. En primer lugar, porque es una moneda que dos turistas encontraron en una playa de Florida en 1989. Con toda seguridad, esta moneda naufragó el día 31 de julio de 1715, cuando los 12 barcos que componían la Flota de Indias dieron con sus mástiles en el lecho marino debido a un fatídico huracán. En segundo lugar, porque el estado de conservación de la pieza es verdaderamente extraordinario. Tanto es así que ha sido graduado por la empresa NGC como MS68, la nota más alta jamás ofrecida a un 8 escudos de cualquier época y de cualquier ceca.
Para muchos coleccionistas, la joya de la Colección Segarra es el 8 escudos más bello que existe. Por eso eran muchos los que creían que iba a batir el récord del 8 escudos más caro jamás vendido en subasta. Se mascaba el nerviosismo en la sala del hotel Four Seasons en la que se celebró la subasta cuando se acercaba el momento de subastar la pieza. Muchos eran los aficionados que trataron de adivinar el precio que alcanzaría. Al final hubo siete pujadores que elevaron el precio de martillo hasta los 630.000 euros. Se pulverizaba así el récord del 8 escudos más caro jamás subastado. Un récord que ya ostentaba la misma firma Jesús Vico desde que en 2012 rematase un 8 escudos de Navarra en 525.000 euros.
Tras la subasta, el Evento Numismático Internacional “Madrid 2024” continuó en el Museo de la FNMT. Allí se presentó la moneda de oro de inversión, tamaño de 1 onza, que desde ya mismo pone a la venta la FNMT. Este año la moneda se dedica al águila imperial, un ave endémica de la Península Ibérica que actualmente se encuentra en peligro.
El Evento prosiguió los días 28 y 29 de junio con actividades en el lujoso hotel Four Seasons. Allí se organizó una convención numismática en la que participaron 64 comerciantes, asociaciones y medios de comunicación numismáticos. Más de 1.000 coleccionistas acudieron para comprar monedas y para disfrutar de un rato agradable junto con sus colegas de afición.
En paralelo se organizó un ciclo de conferencias y mesas redondas en otro salón del hotel Four Seasons. Estas conferencias buscaban ofrecer un punto de encuentro entre el comercio privado, la academia y las instituciones públicas. Intervinieron, entre otros, Andrew Brown (British Museum), Rafael Feria (Museo de la FNMT), Montserrat de Pedro (Brigada de Patrimonio de la Policía Nacional), Antonio Roma (fiscalía), Ángel Rivas (Secretario Junta de Calificación, Valoración y Exportación del Patrimonio Histórico), Dr. Alberto Canto (Universidad Autónoma), Dr. José María de Francisco (Universidad Complutense), Dr. Pere Pau Ripollés (Universidad de Valencia) y el Dr. Martín Almagro (Real Academia de la Historia).
Como broche del Evento, se llevó a cabo una cena de gala en el Museo del Prado. Los asistentes pudieron disfrutar de una visita privada al museo seguida de un cóctel a cargo del chef Ramón Freixa.
El Evento Numismático Internacional “Madrid 2024” ha sido un éxito sin precedentes en España que supondrá un punto de inflexión en la numismática española. Recibió los aplausos unánimes de todos los asistentes, quienes esperan volver a encontrarse en Madrid dentro de un año.
