El presidente de la Diputación de Burgos, Borja Suárez, ha hecho este jueves un balance satisfactorio de lo que está siendo su mandato al frente de la institución provincial.
El dirigente popular ha comparecido ante la prensa arropado por su equipo para explicar los proyectos puestos en marcha y anunciar nuevas iniciativas de cara a la parte final de la legislatura, y ha aprovechado también para arremeter contra el Gobierno central por no facilitar los datos e información de financiación que le corresponde a todas las corporaciones locales y provinciales por la participación de los tributos del Estado para poder elaborar los presupuestos del próximo año.
“No se puede presupuestar sin tener los datos que vamos a ingresar”, advertía Suárez, en declaraciones recogidas por Ical, mientras recordaba que siguen esperando los datos de los presupuestos de 2023.
“No hay presupuestos generales, el Gobierno de España ha secuestrado los datos de financiación que les corresponden a las administraciones locales y no sabemos cuál es el montante que nos va a permitir abordar o no abordar ciertos objetivos”, denunciaba.
Por este motivo, el presidente de la Diputación de Burgos apuntaba que las Cuentas del próximo año de la institución provincial tendrán un esquema y una morfología muy parecida a la actual y con un objetivo claro: conocer la deuda que vamos a dejar.
Suárez señalaba que el debate de la aprobación de los presupuestos del próximo año será uno de los principales retos de la Corporación provincial, aunque antes, en septiembre, se llevará a cabo el debate sobre el estado de la provincia.
La celebración del Día de la Provincia en Quintana Martín Galíndez; la culminación de dos obras “importantísimas”, como son el Consulado del Mar, que está “en sus últimas fases” y el Centro de Recepción de Visitantes de Clunia, con un nuevo proyecto museológico que prevé que pueda estar concluida en 2025, son otras de sus prioridades.
En cuanto al Plan de Carreteras del próximo año, Suárez avanzaba que contará con una inversión cercana a los nueve millones de euros y se comprometía a llegar a toda la red viaria de la provincia para que tenga un estado de seguridad homogéneo.
Igualmente, anunciaba nuevas inversiones en puentes, fundamentalmente, en Las Merindades; y la ejecución del ciclo integral del agua. Así, avanzaba que propondrán durante el proyecto de presupuestos un estudio integral, tanto de abastecimiento como de saneamiento, de gestión del agua en la provincia de Burgos.
“Tiene que ser una gestión conjunta, diferente, más moderna, más responsable y más competitiva”, decía, mientras precisaba que para ello deben saber primero cuáles son las características de la provincia, sus posibilidades o cómo podemos gestionarla y ordenarla de manera racional.
También avanzaba que en los próximos días se lanzará una nueva convocatoria de ayudas al patrimonio y a bares, comercio rural y farmacias rurales, y aseguraba que se cambiará la estructura de personal de la institución provincial con una nueva relación de puestos laborales (RPT).
Finalmente, Suárez destacaba que este primer año de mandato ha sido de gestión y ponía en valor los 23,3 millones de euros ya licitados sobre diferentes obras que ya se están ejecutando frente a los 7,5 millones de todo 2019.
