Cómo las ‘apps’ y las redes sociales nos han condenado a mantener conversaciones interminables
Un hombre se encuentra a un viejo amante en una fiesta. Meses atrás había dejado de seguirlo en Instagram. ¿Por qué? No lo sabe muy bien, no se acuerda y, en su momento, tampoco le dio demasiada importancia. Simplemente, no le apetecía seguir viendo fotos de esa persona con la que mantuvo una relación fugaz:…