Tiene más de 40.000 seguidores, y no nos referimos solo a sus feligreses. El padre Josep María Quintana es toda una estrella en Instagram, y parte de esa popularidad se la debe a Tamara Falcó, una de sus devotas más fieles que visibilizó en sus redes sociales las macrofiestas del rosario.
El cura jugó un papel fundamental en la boda de la marquesa de Griñón con Íñigo Onieva el pasado 7 de julio, puesto que fue él quien animó a Falcó que perdonara a su amado si así se lo decía su corazón, pese a la sonada infidelidad que cometió mientras se encontraba en un conocido y pecaminoso festival de música de Estados Unidos.
En cambio, su respuesta fue la contraria cuando el torero Juan Ortega le manifestó sus dudas sobre su matrimonio con Carmen Otte. “No, así no te cases. Pon tu vida en manos de Dios y él te guiará donde tenga que ser”, aconsejó al diestro, que poco después dejó plantada a su prometida en el altar.
El caso es que su rebaño parece tomarse al pie de la letra sus consejos, y su última recomendación tiene como destinatarios a los maridos que quieren mejorar su vida conyugal con sus esposas.
“Hay que escuchar. Escuchar es una forma de amar, y el matrimonio se fundamenta en el amor”, comienza diciendo el padre Josep María Quintana en sus redes sociales. “Por lo tanto, hay que escuchar y tener paciencia. Aguantad que os sangre la oreja porque escuchar es amar”, añade antes de cerrar con su lema: “Palante y sirculando”.
En definitiva, el cura invita a los maridos a ser más tolerantes y no caer en la discusión a la primera de cambio, un consejo un tanto rancio que perfila una imagen poco amable de las mujeres.
La cosa es que, en el caso de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, parece que es ella quien se aplica esta sugerencia. En más de una ocasión, la marquesa ha explicado que se ha visto obligada a ceder en muchos aspectos desde que son un matrimonio “porque antes podíamos pelearnos y terminar con todo, pero ahora no porque esto es para toda la vida. Estamos obligados a reconciliarnos”, dijo en un desfile de Pedro del Hierro de la Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid.
Parece claro, teniendo en cuenta los antecedentes de Onieva, que el mayor ejercicio de paciencia ha recaído sobre Falcó, tal y como ella misma manifestó en una reciente entrevista publicada en la revista “Yo Dona”: “Hay que ejercitar la paciencia, el cariño, la empatía… y no hay espacio para el orgullo”.
