Un paseo entre olivos milenarios por Canet lo Roig

Un paseo entre olivos milenarios por Canet lo Roig

El origen del aceite de oliva hay que buscarlo en el antiguo Egipto, y luego en Grecia. Fue Roma, sin embargo, la que potenció su expansión por todo el Mediterráneo, aprovechando la magnificente logística imperial. Parece que ya Nerón gustaba de usar agua, aceite de oliva y pétalos de rosas para sus necesidades de perfumería. En las termas romanas era costumbre embadurnarse con este óleo, aromatizado previamente con hierbas silvestres. Luego estaba, por supuesto, la cuestión de su consumo culinario. El aceite más apreciado, en este sentido, era el procedente de Hispania, tanto en forma de oleum ex albis ulivis (de aceitunas verdes) como de oleum maturum (de aceitunas maduras), entre otros.

Seguir leyendo

Please follow and like us:
Pin Share