Un supuesto yihadista ha anunciado en una red del Estado Islámico su intención de trasladarse la semana que viene a Suecia con el fin de atentar contra un “kafir” (infiel) “que se burla de nuestra religión y trata de quemar el Corán nuevamente” Pide ayuda para cuando se encuentre sobre el terreno ya que es la primera vez que viaja a Europa.
Esta forma de actuar choca con la clandestinidad que la banda criminal exige a sus miembros y más parece una provocación para que algún elemento que viva en el país nórdico se delate.
De hecho, los demás usuarios de ese chat se lo echan en cara y y le recomiendan que “en lugar de hacerlo público, contacta a algunos hermanos de confianza, en lugar de que cualquiera te contacte.” aunque le desean que “Alá te conceda el éxito”.
Otro le recomienda que “quizás alguien que publique contenido traducido al alemán o al sueco o que haga las traducciones sería un primer punto de entrada y le recuerdan que “une hermano fue capturado porque habló con un informante que ayudó a facilitar su ataque”.
Los yihadistas adoptan cada día más medidas de seguridad ante el convencimiento de que son vigilados por los “ciberpatrulladores”de las Fuerzas de Seguridad y los Servicios de Información. Anunciar que se va a cometer un atentado es una imprudencia que no suelen cometer los terroristas, pero dado su grado de fanatismo toda precaución es poca.
